Aviones franceses bombardearon Pale, según los servicios de espionaje de EE UU

Los servicios de espionaje de EE UU han concluido que Francia envió sus aviones de combate a bombardear la capital de los serbios de Bosnia como represalia por la muerte el sábado de dos capitanes francese de los cascos azules en Sarajevo. Un alto mando de la Administración estadounidense aseguró el lunes que Francia había utilizado al menos tres aviones Mirage en el bombardeo de Pale. Los detalles de la misión francesa -que fue desmentida el lunes por un portavoz de la presidencia- aún no han sido clarificados, pero los espías estadounidenses han convenido que la única hipótesis posible sobre las explosiones producidas en Pale es la de un bombardeo aéreo, y han descartado tanto el fuego de mortero como cualquier otro ataque desde el suelo bosnio. Los servicios de espionaje de EE UU han tenido acceso a otra información que parecía avalar su conclusión: un miembro del Ejército francés en Bosnia había asegurado a un alto mando serbobosnio que se produciría una reacción muy seria si algún otro soldadó francés perdía la vida por ataques de los radicales serbios.

París no había notificado a la OTAN su intención de efectuar un ataque aéreo sobre Pale, según, un miembro de la Administración de EE UU. Y esta acción unilateral había causado una cierta preocupación en la Administración, puesto que durante el encuentro celebrado en Londres la pasada semana Francia había argumentado que las acciones aéreas podrían llevar a los serbo-bosnios a atacar a los cascos azules.

Los daños producidos en Pale por el ataque aéreo no han sido verificados, puesto que los radicales serbios han prohibido a los periodistas que se acerquen a la zona afectada por los bombardeos.

Desmentidos ambiguos.

El diario francés Libération, que sugería en su edición del lunes que el ataque aéreo se debió a una bomba dirigida contra la casa de un alto Cargo del Gobierno de Radovan Karadzic, informaba asimismo que el Mirage francés evitó ser detectado por los controles de la OTAN al volar bajo el amparo del vuelo de reconocimiento regular que efectuaron otros aviones franceses.

Aunque la portavoz del presidente francés, Jacques Chirac, se apresuró a desmentir la información publicada por el rotativo, las declaraciones del ministro de Defensa, Charles Millon, fueron algo ambiguas. Éste dijo que "no sabía de dónde, había sacado Libération la información que publicaba", y añadió que de ser cierta "hubiera sido la respuesta cortecta a la lógica de guerra escogida por los radicales serbios". Desde la presidencia se aseguraba que tras la muerte de los cascos azules fanceses Chirac había dado órdenes de reforzar las tropas de las Naciones Unidas, "y ninguna otra orden".