La coalición japonesa sigue en el poder al asegurarse la mayoría en el Senado
La coalición gubernamental que dirige Japón desde hace un año se aseguró, en las elecciones de ayer, su permanencIa en el poder al. mantener la mayoría en el Senado. La victoria, sin embargo, significó un retroceso, ya que, según los resultados definitivos difundidos anoche, los tres partidos de la coalición obtuvieron 66 escaños de los 126 en liza debido al revés de los socialistas, mientras que en la legislatura anterior tenían 75. La Cámara de Consejeros consta de 252 miembros electos por un periodo de seis años, pero cada tres años se renueva la mitad de ésta. En la parte de la Cámara que no ha sido convocada a las urnas, los socialistas, el Partido Liberal Demócrata (PLD) y el Sakigake suman 83 escaños.
El primer ministro japonés y líder socialista, Tomiichi Murayama, que indicó antes de las elecciones que si su partido sufría una derrota. abandonaría el cargo, no compareció anoche ante los medios de comunicación, pero el presidente del PLD, Yohei Kono, su principal aliado, afirmó que Murayama debe continuar al frente del Ejecutivo, ya que Ia coalición en su conjunto parece que dispondrá de la mayoría de los escaños". Y añadió: "Eso significa que tenemos la confianza del pueblo".El partido socialista, que para aliarse con su histórico enemigo el PLD tuvo que renunciar a varios de sus principios básicos como su oposición a las bases militares de Estados Unidos, sufrió ayer un duro revés. Según los datos emitidos por la televisión, sólo obtuvo 16 escaños de los 126 en liza, sus peores resultados desde 1945, seis menos de los que poseía.
El desencanto del electorado con los políticos se hizo patente después de que sólo depositaran su papeleta el 44,5% de los 97,3 millones de japoneses convocados a las urnas.
Victoria del Shinshinto
Las elecciones, consideradas un referéndum sobre la actuación del primer ministro, de 71 años, han dejado como claro vencedor al Shinshinto, el Partido de la Nueva Frontera (PNF). Según los resultados finales, el PNF obtendrá 40 escaños, 20 más de los que tiene en la actualidad. Con en ello, el PNF logra saltar sorprendentemente al primer plano de la política japonesa, sólo por detrás del PLD.Formado en diciembre pasado de una alianza de nueve partidos minúsculos, entre los que se incluyen desertores del PLD, budistas conservadores, jóvenes reformistas y activistas laboristas, éstos son los primeros comicios en los que el PNF participa a nivel nacional. Cuenta con tres populares figuras: los ex primeros ministros Toshiki Kaifu, Tsutomu Hata y Morihiro Hosokawa, pero se le critica que el poder lo ejerce entre bastidores el poderoso Ichiro Ozawa.
El PLD logró 46 escaños, 13 más de los que tenía, y el Sakigake, el tercer partido de la coalición gubernamental y una escisión del PLD, tres escaños, es decir, dos más que hasta ahora.
El Partido Comunista de Japón también parece haberse beneficiado de la renuncia del Partido Socialista a sus consignas más izquierdistas. Los comunistas consiguieron ocho escaños, con un aumento de tres. El resto de los 126 escaños de la Cámara de Consejeros lo obtuvieron partidos minoritarios e independientes.
Las elecciones para la Cámara baja están previstas para 1997, pero muchos analistas creen que se celebrarán antes tras la fuerte bofetada que la clase política recibió ayer del electorado desertando las urnas.
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