Llamamiento de las asociaciones de profesionales de la justicia a la "cordura, serenidad y sentido común"

El consejo rector de la Confederación de Asociaciones Profesionales de la Justicia -que agrupa a los colectivos mayoritarios y conservadores de jueces, fiscales y secretarios judiciales-, hizo público ayer, con cierto patetismo y solemnidad, ante "el deterioro de la situación política del Estado mismo, ( ... ) un llamamiento a la cordura, serenidad, sentido común y responsabilidad de todos, especialmente de quienes ejercen funciones públicas", para la inmediata "recuperación de la confianza en el Estado".El documento elogia la actuación de los medios de comunicación al poner en evidencia el deterioro político "lamentablemente solos, ante la pasividad de muchas instituciones y el hermetismo de las afectadas". Recuerda la sucesión de escándalos "que acaban llevando ante los jueces casos de corrupción, agresión a los derechos fundamentales y hasta crímenes de Estado, en los que aparecen supuestamente involucradas altas personalidades e instituciones".La confederación pone de manifiesto el descenso de la confianza pública en las instituciones, y las "maniobras dirigidas a sustraer los hechos del conocimiento de la Justicia, a la que incluso se ha llegado a instrumentalizar", asegura, "tratando de limitar sus facultades o entorpecer su labor precisamente por quienes más obligados estaban a la colaboración". El manifiesto añade, sin referirse a hechos concretos, que "en muchos casos no se han depurado plenamente las responsabilidades políticas derivadas de graves hechos, mientras el ciudadano asiste, con justificada desconfianza, al largo proceso de exigencia ante los tribunales de las responsabilidades penales y económicas".

El documento afirma que sólo "en el marco del Estado de derecho y bajo el imperio de la Constitución y de las leyes", será posible encontrar solución a los problemas y, a la vez que propone frenar "precipitadas reformas legislativas en el campo de la Justicia", pide "un efectivo fortalecimiento de lo que queda del poder judicial, convertido en último resorte del Estado de derecho y baluarte de las libertades públicas".