CiU ve triunfalista la versión del PSOE sobre la entrevista de Pujol

Convergència i Unió expresó ayer su malestar por las versiones excesivamente triunfalistas que algunos dirigentes socialistas hacen de la entrevista del pasado sábado entre Felipe González y Jordi Pujol. El portavoz y secretario general adjunto de Convergència, Pere Esteve, declaró ayer tarde que lo que están diciendo Joaquín Almunia y Raimon Obiols responde más a un intento de "dar una imagen conveniente" para el PSOE y el Gobierno que de explicar realmente el contenido de la entrevista.

Tanto Almunia como Obiols han dado por sentado que está garantizado el apoyo de CiU al Gobierno hasta final de año. "Podemos asegurar", dijo Esteve, "que en contra de lo que dicen ellos [por Obiols y Almunia] no existe todavía un acuerdo sobre proyectos de ley pendientes. Sólo hay propuestas, que ahora nosotros debemos estudiar", añadió.

En todo caso, agregó Esteve, hay dos cuestiones básicas que no quedan claras: el escándalo de las escuchas del Cesid, "sobre el que sigue sin haber explicación y respuesta política adecuada?, y los presupuestos para 1996, "sobre los que existen diferencias de enfoque muy importantes, que hacen difícil el acuerdo".

Esteve aludía a que CiU propugna modular los objetivos de reducción del déficit público, con el argumento de que los objetivos fijados en Maastricht no es necesario cumplirlos en 1997 como pretende Solbes y se puede evitar un ajuste traumático.

Ruptura no traumática

Los nacionalistas catalanes esperan que González despeje las principales incógnitas sobre su capacidad para seguir gobernando hasta diciembre en su comparecencia parlamentaria de la próxima semana. Estas incógnitas incluyen desde el caso Cesid hasta los presupuestos y el cambio de Gobierno, además de la política autonómica. Hasta ese momento CiU no se comprometerá a nada.Ayer mismo, Pujol declaró que la comparecencia de González debe ser, "en ciertos aspectos", más importante que la de este jueves para hablar del Cesid, porque en ella deberá dar explicaciones sobre la situación general del país. Y agregó: "Lo que se haya de hacer en España debe hacerse de tal forma que no se produzcan rupturas traumáticas que después afecten al vivir colectivo, y no hace falta decir que a la vida política, de una manera muy negativa".

Dirigentes de CiU interpretan que Pujol se refiere a que el fin del apoyo global al Gobierno debe producirse de forma suave. Es decir, que los diputados nacionalistas seguirán apoyando al Gobierno hasta diciembre en todo aquello en que estén de acuerdo, y sin oposición sistemática.