_
_
_
_
Entrevista:

"Lo grave es que el Gobierno sea vulnerable al pulso"

Tiene reflejos de jugador de tenis de mesa, y pedalea como un velocista contrarreloj. Pero las derrotas, y algún patinazo, han atemperado en Alberto Ruiz-Gallardón, de 36 años, su vena enérgica, enterrada por, su vena pragmática.Pregunta. Manglano ha dimitido. ¿Para usted es suficiente o su dimisión debe ir acompañada de la de Serra?

Respuesta. La dimisión de Manglano no es suficiente. Si el Gobierno no ha ordenado las escuchas, el que se produzcan sin su conocimiento supone una incapacidad de control del Cesid.

P. ¿Es igual que las escuchas se hayan producido por encargo del Gobierno o que se hayan realizado sin su conocimiento?

R. No es igual. Pero en ambos casos el vicepresidente del Gobierno tiene una responsabilidad incuestionable e ineludible. Y si no dimite será no sólo legítimo sino obligado preguntarse qué impide a Felipe González cesar a Serra.

P. Quizá el pensar que, si no le queda nadie delante, la siguiente embestida le dará ineludiblemente a él.

R. . Eso. Sera una actitud preventiva que. no justificaría en modo alguno mantener a una persona que o bien ha ordenado una acción ilegal o que es tan absolutamente incompetente que ha sido incapaz de evitarla.

P. ¿En los servicios secretos están apareciendo ilegalidades, y en la política emergiendo métodos de gánster?

R. llegalidades en los servicios secretos, desde luego. De los métodos de presión sobre el Gobierno podemos reprobar usos y elementos, pero si son preocupantes y pueden afectar a la estabilidad es como consecuencia de las ilegalidades cometidas. Lo grave no es que alguien esté echando un pulso l Gobierno. Lo grave es que el Gobierno sea sensible al pulso, y vulnerable.

P. ¿Teme usted que alguien esté echando un pulso al Gobierno, y no sólo al Gobierno?

R. Lo que creo es que hay alguien que está ridiculizando al Gobierno de Felipe González. Pero sólo se ridiculiza a aquel que previamente ha hecho el ridículo. Y,, resulta ridículo que. un servicio de inteligencia sea incapaz de Controlar la seguridad de su propia documentación.

P. La traición de la confianza depositada en un servicio secreto para que espíe a los sospechosos...

R. Ésa es la gravedad de este asunto. Cuando se quiebra una confianza que permite al Cesid funcionar sin el control. parlamentario a que está sometido cualquier otro organismo, el presidente del Gobierno asume una responsabilidad que, en este caso, tiene que, traducirse en el cese del vicepresidente.

P. Si presidiera un Gobierno que ha conducido a una persona ante los tribunales, y esa persona pone en marcha la difusión de una irregularidad para conseguir la destitución de quien le había enfilado, ¿usted qué haría?

R. Si la irregularidad es cierta y está constatada, cesaría al responsable. Confucio decía que Cuando alguien pone el dedo en la llaga sólo los necios piensan que lo importante el el dedo. En este caso incluso puede producir irritación que el dedo haya conseguido su objetivo. Pero lo importante no es la filtración, sino que se hayan producido escuchas irregulares, y que se hayan podido difundir secretos que afecten a la seguridad del Estado.

P.¿Le preocupa que quien chantajea hoy a sus adversarios les chantajee mañana a ustedes?

R. Me preocupa. Pero más me preocupa que el Gobierno tenga actuaciones que permitan el chantaje. No dudo de que intentarán chantajearnos cuando seamos el Gobierno de España, pero tampoco dudo de que no tendremos ilegalidades que ocultar y, por tanto, ningún chantaje que temer.

P. Hablando de temer. Usted no ha temido ir a barrios de izquierda para escuchar sus problemas y luego pedirles el voto. ¿Ahora, tendrá el valor de volver para escuchar sus quejas y plantear usted sus soluciones? ,

R. Llevo ocho años escapándome de este despacho y pateando la calle. Cree que por eso soy presidente.

P. ¿Será un presidente en la calle?

R. Seré un presidente en la calle, mirando al sur.

P. Desde la seguridad de ser un afianzado líder de centro-derecha, ¿está a la conquista del voto del centro-izquierda?

R. Mi intención no es vencer en el terreno de la izquierda, sino convencer de que los valores que han llevado a muchos ciudadanos a votar a la izquierda los defendemos hoy mejor el centroderecha. Nuestro compromiso con la solidaridad se va a ver en que el mayor esfuerzo lo vamos a hacer en el sur yen el corredor del Henares.

P. ¿Cuál es su patrimonio?

R. Mi casa, mi despacho de abogado, un coche y dos motos. El dinero que tengo lo heredé de mi padre.

P. ¿Le parece bien la orden que dio José Bono, presidente de Castilla-La Mancha, de que se publicara en el Boletín Oficial los bienes y actividades de todos los altos cargos?

R. Tiene que existir un registro público que permita a cualquier ciudadano conocer cuál es el patrimonio de un alto cargo cuando llega y cuando se va.

P. Pero ¿ordenará usted o no una declaración de ese tipo a todos los altos cargos de su Gobierno?

R. Me parece una idea positiva. Sí. Por tanto, estoy dispuesto a asumirla.

P. Usted ha dicho que quiere el poder político para reducir ese poder. Ponga tres ejemplos de devolución de poder a la sociedad.

R. Reducción de la intervención de los políticos en el control de las cajas de ahorros. Privatización de Telemadrid...

P. Eso no depende sólo de usted, requiere una autorización de las Cortes.

R. Seis meses después de que se haya producido un cambio de mayoría en el Congreso que permita esa autorización será privatizada Telemadrid. Y tercer ejemplo: establecer, y vamos a ser los pioneros en España, las listas electorales abiertas.

P. ¿Y qué cautelas va a tomar para evitar las carreras entre compañeros de partido que intentarán conseguir cada uno más dinero para su campaña en empresas o entidades que no se lo darán altruistamente, como se ha visto en Italia?

R. Mediante la sustitución de la circunscripción única por los distritos unipersonales. Pero quiero decir también otra cosa: esta reforma de la ley electoral de la Comunidad de Madrid tendrá que hacerse por acuerdo del PP, PSOE e IU.

P. Eso suena a propuesta que usted exhibe contando con que no sera aprobada por la negativa de los demás.

R. Lo que le oí a Joaquín Leguina en la campaña electoral es coincidente con esa reforma electoral. Y no he oído un discurso contrario por parte de IU.

P. A los socialistas se, les reprocha haber pecado de soberbia. ¿De qué pecado se cuida usted en el PP?

R. Nuestro pecado principal seria pensar que el día que entremos en el Gobierno hemos llegado. Esa no es la meta, es la línea de salida. Ahora es cuando empieza todo. Y si no nos damos cuenta, nos equivocaremos.

P. Que le critiquen por "no poner a los nuestros, que para eso les hemos votado", ¿muestra que la publicidad del nuevo estilo de gobernar no está tan asimilada en realidad?

R. Estoy de acuerdo con ese planteamiento. Todos esos que me critican no han leído mi programa electoral, o quizá pensaron que era para captar votos,y luego me olvidaría de los compromisos. Eso lo que muestra es que no me conocen. Prometí objetividad, y la va a haber. Prometí gobernar no sólo para los que nos votasen, y lo voy a hacer. Prometí no favorecer a los próximos, y no les voy a favorecer.

P. ¿Cueste lo que cueste?

R. Como decía Cervantes en El Quijote, "hay tareas en la vida cuyo éxito no es tanto conseguirlas como intentarlas".

P. ¿Qué pasará cuando los empresarios que se entendieron bien con el PSOE se quieran entender bien con usted?

R. No se trata de que las relaciones sean buenas conmigo, sino con la Comunidad. Pero yo no vengo a gobernar para los que me han votado, sino para todos los ciudadanos de Madrid.

P. ¿Y qué pasará cuando a los sindicatos, con los que el PP se ha llevado bien mientras no ha tenido que gobernar" les tenga que llevar la contraria?

R. Vengo con voluntad de dialogar sobre todo aquello que no esté contenido en mi programa. Pero nunca dejaré de cumplir mi programa por facilitar un entendimiento con los sindicatos. Ni con los empresarios.

P. ¿La transformación que más notarán los ciudadanos?

R. La modernización de los servicios públicos, de las infraestructuras de transporte y de las comunicaciones.

P. ¿Y lo que los ciudadanos deben saber que les va a perjudicar?

R. Lo saben, porque lo dije: invertiremos más donde más se necesita.

P. ¿La herencia que recibe es de las que permiten cimentar éxitos o justificar fracasos?

R. Hice mi programa conociendo la realidad de Madrid. Todo lo comprometido es perfectamente realizable.

P. ¿No ha encontrado esqueletos en los armarios?

R. En la Comunidad no hay armarios, hay archivos.

P. ¿Le teme más al fracaso o a las envidias?

R. Las envidias las entiendo como constatación del éxito de las medidas que estamos adoptando. Prefiero que me envidien por hacerlo bien a que me compadezcan por hacerlo mal.

P. ¿Quiere dibujar en la Comunidad de Madrid lo que sería su estilo de gobernar en el Gobierno de la nación?

R. Me gustaría que, transcurrido un año de mi gestión, mi partido y mi candidato a presidente del Gobierno, José María Aznar, pudieran presentarnos corno ejemplo de lo que harían al frente de la nación.

P. Como Aznar se ha impuesto un límite de ocho años en el Gobierno y usted también, puede ocurrir que cuando salga él pueda aspirar a entrar usted...

R. Ese día podrán ocurrir dos cosas: que yo tenga ideas, ánimos y capacidades para intentar hacer una política nacional o que prefiera volver a. mi despacho. Me comprometo a contárselo en otra entrevista en EL PAÍS. Pero, por favor, no me pida que le diga hoy lo que haré el 18 de junio del 2003.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_