Los tres cuerpos de seguridad del País Vasco siguen sin conectar sus bancos de datos
Los cuerpos policiales que operan en el País Vasco -Ertzaintza, Cuerpo Nacional de Policía y Guardia Civil- seguirán sin conectar sus bancos de datos para intercambiarse información debido a problemas técnicos, según los máximos responsables de la Junta de Seguridad. La viceministra de Interior, Margarita Robles, y el consejero vasco de Interior , Juan María Atutxa, expresaron su "voluntad política de trabajar para incrementar la coordinación y la eficacia".Margarita Robles intentó alejar el fántasma de la desconfianza entre cuerpos policiales al asegurar "los roces son algo del pasado". La Ertzaintza asume ya el papel de policía judicial general,
Los integrantes de la Junta de Seguridad, en presencia de Robles, el delegado del Gobierno en -el País Vasco, José Antonio Aguiriano, los tres gobernadores civiles y el consejero Atutxa, se comprometieron a elaborar un estudio técnico para superar los problemas informáticos existentes" de cara a la conexión definitiva a los bancos de datos, y por lo tanto a una coordinación real. Robles y Atutxa resaltaron los avances conseguidos.
La Ertzaintza, la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía han establecido los sistemas de enlace para el intercambio de información distinguiendo entre la que requiere comunicación inmediata, la reservada, la documental y la que se cruce a petición de cada cuerpo. Un portavoz del Gobierno vasco subrayó ayer que "ningún banco de datos de interés policial se ha excluido del acuerdo, aunque todavía no se pueda poner en marcha".
Además, la Ertzaintza asume la función de policía judicial, salvo en lo relativo al contrabando, los tipos penales contra la hacienda del Estado, falsificación de documentos públicos, la parte del aire en los aeropuertos, vigilancia aduanera, edificios oficiales y control de armas y explosivos.
La investigación del terrorismo se realizará de forma compartida con las fuerzas de seguridad del Estado.
Los representantes del Ministerio de Justicia e Interior se comprometieron a adecuar sus plantillas policiales a la nueva situación en el plazo de un mes. La Ertzaintza incrementará sus efectivos de 7.000 previstos al final del despliegue hasta los 7.350 para hacerse cargo del traslado de presos. En la actualidad, 1.200 ertzainas están recibiendo formación en materia de investigación criminal para asumir con garantías las nuevas funciones de policía judicial.
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