_
_
_
_
_

Jordi Pujol: "Sólo Dios Nuestro Señor sabe cuando serán las elecciones catalanas"

Enric Company

La convocatoria de elecciones autonómicas en Cataluña depende de cómo evolucione la colaboración entre el Gobierno del PSOE y Convergència i Unió (CiU). El líder de CiU y presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, afirmó ayer en el Parlamento catalán que sólo cuando se hayan aclarado las incertidumbes que actualmente ensombrecen esta colaboración podrá determinar si las elecciones autonómicas catalanas se celebran en marzo, cuando finaliza la legislatura, o antes. Presionado para que concretara más, Pujol respondió: "Por favor, no insistan en preguntarme algo que sólo sabe Dios Nuestro Señor".Pujol especificó ayer los tres factores que condicionan su decisión: primero, averiguar cuál es la "capacidad y voluntad"' del Gobierno del PSOE para avanzar en los acuerdos con CiU en materia económica, autonómica y respecto a una serie de leyes de ámbito general; segundo, garantizar una presidencia española de la Unión Europea; tercero, que no coincida con las elecciones generales en España. Este último aspecto es, subrayó Pujol, básico.

Horas después, en Madrid, Pujol conversó con el ministro de Exteriores, Javier Solana, sobre la Conferencia Euromediterránea, que albergará Barcelona en noviembre. Luego, el presidente catalán asistió al acto de conmemoración de la adhesión de España a la Comunidad Europea.

Allí, Pujol contestó con un "Nos vamos a ver" a una pregunta sobre si se entrevistará pronto con el presidente Felipe González, informa Ignacio Cembrero. El presidente de la Generalitat confirmó que había enviado una misiva al jefe del Gobierno en la que, precisó, "no le regaño". Rehusó dar más detalles porque las cartas, explicó, pertenecen a quienes la reciben. Poco antes de hacer estos comentaros Pujol había charlado unos minutos con González y con el presidente del Senado, Juan José Laborda.

El 'caso Roma'

'Por otra parte, la Audiencia Nacional rechazó ayer admite a trámite la querella por presunta malversación presentada por un grupo de industriales, contra un consejero de Obras Públicas del Gobierno catalán, Jaume Roma. El juez Carlos Bueren determinó que el asunto no es de su competencia, pronunciarse sobre el contenido de la querella.El escándalo estalló cuando se supo que Roma está acusado de pagar sólo 30 millones un chalé que costó 89 y construido por una empresa que trabajaba para la Generalitat. Roma lleva una semana sinrebatir las acusaciones, aunque ha dicho que son falsas. Pero dijo ayer que su consejero podrá aclararlo en un par de días

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_