Ajuste duro en los semanarios

Corren tiempos de balances y de juntas de accionistas también para los semanarios de información general, uno de los sectores de la comunicación en el que la crisis se ha manifestado con mayor virulencia en el último año. Ahora han comenzado su recuperación, según explican sus empresarios o directivos, tras haber tomado, en la mayor parte de los casos, fuertes medidas de ajuste.La empresa editora de la revista de información general Tribuna ha reducido su capital a cero y ha suscrito una nueva ampliación de capital que arranca con 15 millones de pesetas, con el propósito de incrementarlo en sucesivas ampliaciones hasta alcanzar los 200 millones.

Esa es una decisión que adoptó la junta extraordinaria de accionistas de la empresa editora que se celebró el lunes pasado. También aprobó unas cuentas que implican la pérdida de 67 millones de pesetas en 1994. Debido al plan de ajuste -reducción de 21 puestos sobre una plantilla de 41- las pérdidas disminuyeron un 50% en relación con el año anterior. Vicente Montiel, presidente de la empresa y principal accionista anticipó, no obstante, que la revista ya lleva tres meses de este año "con números positivos".

Este semanario "no entrará en la guerra de los regalos ni del márketing promocional" según su director, Fernando García Romanillos. "No estamos dispuestos a desvirtuar la esencia de la información".

La revista Época ha optado por reducir los salarios en un 33% de una plantilla que se eleva a 55 empleados, según fuentes del mismo. No fue posible contrastar estos datos con su presidente y director, Jaime Campmany, pese a los intentos realizados.

La revista Cambio 16, envuelta en especiales circunstancias de cambio de propiedad -de Juan Tomás de Salas pasó a Jesús de Ramón Laca-, redujo el año pasado su plantilla a la mitad. La revista tuvo pérdidas en 1994 -sus directivos no han querido cuantificarlas hasta que se celebre la junta de accionistas- pero su director, Román Orozco, cree que el semanario ya está a punto de volver a ganar dinero. Quiere hacer subir la difusión "no regalando productos, sino aumentando el número de páginas y ofreciendo monográficos sobre diferentes temas".El próximo día 12 se celebrará la junta general del Grupo Zeta. Entonces se conocerán los resultados de las revistas de información general Tiempo e Interviú. Aunque los beneficios globales del grupo superan los 1.000 millones, el presidente, Antonio Asensio ha hecho saber que quiere una mayor rentabilidad.

Tiempo es, después de Interviú, la revista de información general de mayor difusión. Aún así el pasado año realizó un ajuste de plantilla que dejó en la calle a 16 personas, entre contratados y fijos. "La subida del precio del papel se ha notado mucho", dice su director, José Oneto, "y hemos tenido que reducir al máximo el consumo. Damos una revista de 150 páginas cuando debería ser de 250".

Tiempo, al contrario que otras revistas, ha usado la herramienta de las promociones para aumentar su difusión. "Todos estamos presos del regalo", afirma Oneto, quien añade que se está imponiendo un nuevo modelo de revista "de corte sociológico y basada más en los análisis y las opiniones que en las grandes exclusivas".

El Siglo, que edita también el semanario económico Nuevo Lunes, ha registrado unas pérdidas de 70 millones de pesetas en 1994 y ha tenido que reducir la plantilla de 28 a ocho personas. "Hemos hecho un esfuerzo espartano de ajuste", dice el director, José García Abad.