El Real Madrid no dará la vuelta al Camp Nou si gana el título de Liga

Johan Cruyff y Jorge Valdano recuperan a sus mejores jugadores para el pártido del sábado. Al Barcelona vuelven las vacas sagradas -Stoichkov y Koeman-, y Guardiola reaparece tras su lesión. Al Madrid se incorpora Quique Flores, superadostambién sus problemas fisicos. Con todo su potencial, ambos equipos afrontan un encuentro decisivo. El Madrid podrá resolver el título, y el Barça, acercarse a Europa. Los madridistas aplazarán la celebración: "No daremos la vuelta al Camp Nou. Hay que ser respetuosos" dice Quique.

En el Madrid nadie niega que ganar la Liga en el Camp Nou tendría un significado especial, sobre todo después de las experiencias de los dos últimos años. Si el título llega, los madridistas tienen claro que las celebraciones serán cuando regresen a casa. "El Madrid es un equipo respetuoso y no haría nada fuera de lugar. Cualquier festejo se montaría aquí", explica Quique. El jugador vive con especial ilusión las vísperas del partido. Sería su primer título de Liga. "Estamos con mucha moral", dice el madridista.Johan Cruyff se plantea variar el equipo que ha venido actuando en las últimas semanas. Los jóvenes dejarán paso a las vacas sagradas: Stoichkov y Koeman. El búlgaro, sin embargo, sufre una lesión de lumbalgia, y es duda. También se espera la reaparición de Guardiola, lesionado desde marzo en el partido de la Liga de Campeones contra el Paris Saint Germain.

"El partido del sábado debe servir como prueba para calibrar nuestras posibilidades con vistas a la Copa de la UEFA. Prefiero, en estos momentos, jugar con el Madrid en nuestro campo que contra cualquier otro equipo" explica Bakero. El capitán no quiere entrar en otras cuestiones: "Mi única preocupación con relación al Madrid es la recuperación de Michel. Lo demás no me interesa. Responderemos en el campo. Si el Madrid es mejor que nosotros, que lo demuestre".

La expectación que despierta el encuentro alcanza a otros países. Más de 800 millones de espectadores seguirán el encuentro por televisión. Las entradas están agotadas. El Barcelona sólo ha puesto a la venta 14.000, de las que 270 serán para los seguidores del Madrid. La peña Ramón Mendoza viajará en dos autocares para ver el partido. Un, total de 750 policías vigilarán el Camp Nou. Hasta se ha diseñado un plan de emergencia que permite vaciar el estadio en cuatro minutos.