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28 MAYO

HB congrega a varios miles de personas en la contramanifestación de San Sebastián

Aurora Intxausti

Varios miles de personas participaron ayer en San Sebastián en la manifestación convocada por Herri Batasuna en respuesta a la organizada el pasado sábado por grupos pacifistas que pedían la libertad del empresario José María Aldaya secuestrado Por ETA el pasado 8 de mayo. La contramanifestación, bajo el lema Euskal Herria askatu (Libertad para Euskal Herria), obedecía al intento de escenificar un enfrentamiento entre dos sectores de la sociedad vasca para transmitir la impresión de que ambos son más o menos homogéneos.

Al grito de "Gora ETA Militarra" (Viva ETA Militar), comenzaron a desfilar por las calles de San Sebastián miles de simpatizantes de Herri Batasuna para pedir la libertad para Euskadi. El número de los asistentes era notablemente inferior a los convocados por las organizaciones pacifistas que un día antes habían pedido en esas calles y en silencio la libertad del empresario secuestrado. Las expresiones a favor de la organización terrorista se corearon a lo largo de todo el recorrido en mayor cantidad que las que pedían libertad para el País Vasco. Tres espontáneos disfrazados de kaseros y con el rostro cubierto colocaron en el asfalto una bandera de España y otra de Francia, suceso que fue aclamado por los manifestantes, para que todos pudieran pisar las dos enseñas.Los dirigentes de Herri Batasuna no pudieron evitar hacer mención a la manifestación de los pacifistas, y, con evidente tono de desprecio, afirmaron que en la que se celebró el sábado lo único que se pretendía era "cerrar la puerta a la libertad, aunque nosotros somos miles y miles más". El portavoz de HB, Floren Aoiz, fue el encargado de dirigirse a las masas para dar una lección con su discurso de lo que es y no es democracia, ya que, según él, la que existe actualmente sólo sirve para "oprimir y reprimir al pueblo vasco". Reivindicó en su intervención la unidad territorial y la autodeterminación como bases para que exista una verdadera democracia en Euskadi. Aoiz volvió a repetir que ETA ha realizado una propuesta de paz, aunque no mencionó en ningún momento que esa organización terrorista tiene secuestrado a un ciudadano vasco.

Los ataques a la prensa fueron constantes por parte de los militantes de HB que acudieron a San Sebastián para manifestarse. Expresiones como "televisión, manipulación y terrorista" o "a ver lo que ponéis, os vamos matar" se pudieron escuchar en numerosas ocasiones a lo largo del trayecto de la manifestación. Como colofón de las amenazas y advertencias a los periodistas había una pancarta en el bulevar donostiarra, firmada por HB y Jarrai, en la que se leía: "Si no tenéis cuidado con los medios de comunicación, os harán amar al opresor y odiar al oprimido. Malcolm X".

Herri Batasuna no solamente ha querido medir sus fuerzas sacando a la calle a su militancia, sino que también ha diseñado un símbolo para contrarrestar los lazos azules con los que muchos vascos piden la libertad de Aldaya. En la nueva insignia diseñada por esa formación política figura, junto a una ikurriña, el lema Euskal Herria askatu.

Por otra parte, grupos radicales encapuchados protagonizaron la madrugada de ayer en Ordizia (Guipúzcoa) numerosos desórdenes públicos. Durante los incidentes, se ocasionaron destrozos en cabinas telefónicas, entidades bancarias e incluso fue cortada la línea férrea con barricadas de fuego, según informaron fuentes de la Ertzaintza.

Lazo azul en Jaizkibel

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Amigos de los hijos de José María Aldaya, el empresario que ETA tiene secuestrado desde el pasado 8 de mayo, colocaron ayer en una de las laderas del monte Jaizkibel un lazo azul de más de cien metros cuadrados. El símbolo con el que se exige a la organización terrorista que deje en libertad al industrial fue colocado por amigos de los tres hijos de Aldaya a primeras horas de ayer en el monte, en las proximidades de la casa Haritza Leku, donde reside la familia.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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