El trampolín perfecto
" Si no fuera por el fútbol, no me conocerían ni las ratas". Antonio Martínez Laredo no tiene duda. El fútbol es el mejor trampolín para aspirar a la alcaldía de Burgos. No es el único que utiliza el deporte como plataforma para alcanzar metas en otras canchas. Se trata de otro juego, el de la política. Jugadores, dirigentes, técnicos, árbitros e incluso un equipo, el Vilobí catalán, explotan la vena deportiva en aras de otro objetivo, en esta ocasión, político, con motivo de las elecciones autonómicas y municipales del próximo 28 de mayo.Antonio Martínez Laredo es el último dirigente futbolístico en subirse al autobús del deporte que pueda conducirle a una alcaldía. Juega su baza de presidente del desaparecido Burgos en dos, etapas, ambas, en la Primera División del fútbol. Ahora, sin equipo que exponer, quiere comprar un club de Segunda División. Se ha montado en el mismo carro que Jesús Gil y Augusto César Lendoiro, que ya saben y repiten el matrimonio político-deportivo en unas elecciones.
Jesús Gil utilizó la presidencia del Atlético de Madrid para facilitar su camino a la alcaldía de Marbella. Creó su partido a su imagen y semejanza de tal forma que lleva el nombre de su apellido: GIL (Grupo Independiente Liberal) y ahora quiere repetir. Sus tentáculos se desbordan por rama familiar. "De tal palo tal astilla" y su hijo Miguel Ángel Gil, vicepresidente del Atlético, aspira a la alcaldía de Estepona, que puede convertirse así en un distrito de Marbella.
Lendoiro tiene otra lectura. La presidencia del Deportivo y su explosión las últimas temporadas en el fútbol español no consiguieron abrirle las puertas de la alcaldía coruñesa en cuantos intentos ha hecho. Este diputado nacional por su ciudad dio en un hueso con nombre y apellidos: Francisco Vázquez. La fuerza del PP no ha podido hasta ahora con el patrón de los socialistas en La Coruña ni con la ayuda de los goles de Bebeto, Fran o Djukic.
Martínez Laredo, como Gil, también ha fundado su partido: PUL (Progreso, Unión y Libertad). "¿Mi línea? Norte, sur, este y oeste...", explicó el ex presidente. "No soy político. Quiero gestionar el ayuntamiento sin que nadie me condicione". "Honradez y trabajo", es el lema de este empresario, con residencia en Madrid, que no descarta que la alcaldía de Burgos puede ser algo más que un primer paso. "No digo que tenga aspiraciones a la presidencia del Gobierno, pero vamos a ver lo que dan de sí estas elecciones".
La cantera del Atlético de Madrid, por otra parte, además de algún que otro futbolista, da aspirantes políticos. Su ex presidente, el doctor Alfonso Cabeza ha dado un salto a la arena política. Se presenta a la alcaldía de la localidad madrileña de Alcobendas y a la presidencia de la Comunidad por el Partido de los Independientes de España (PIE). "Una buena cabeza dirige un pie firme", es la sentencia de este médico forense, que podría servirle de slogan.
El Vilobí es un equipo de Tercera División a cuyo nombre ha añadido Agrupació Electoral Independent para aspirar a la alcáldía de la localidad. Uno de sus directivos, Jordi Menció, encabeza la lista. "Nuestra intención es conseguir el ascenso al Ayuntamiento", aseguró.
Los árbitros tienen puesta su mira en escalafones más modestos. Se conforman con una concejalía. Evaristo Puentes Leira, un empleado del Banco de Galicia en la localidad coruñesa de As Pontes, puede cerrar una brillante temporada con su elección como concejal del PP en su pueblo y con su ascenso a Primera División de fútbol. El PP cuenta con otro afiliado, también árbitro de la máxima categoría, Álvaro Gómez López, como baza electoral. Este administrativo de la asesoría jurídica de la empresa Nacional Bazán figura en el puesto 6 en la candidatura a la alcaldía de Cartagena.
"No me he pasado a la política. Sólo pretendo aportar algo a mi ciudad. No sé cómo se da un mitin", es la declaración de principios de otro árbitro, Antonio Martín Navarrete, importante empresario inmobiliario, que figura como independiente en la candidatura del PSOE a la alcaldía de Málaga, a la que aspira su primo Eduardo Martín Toval.
Otro candidato que no se ve metido en política es el entrenador del Leganés (Madrid), de Segunda División, Luis Angel Duque, afiliado al PSOE e incluido con el número 18 en su candidatura a la alcaldía de la localidad. "No soy político. Mi intención es ayudar al partido con la captación de votos".
La alcaldía de Becerril de Campos (Palencia) se ha convertido en una carrera más del fondista del pueblo: Mariano Haro. Los 5.000, los 10.000 metros son ya historia en su carrera deportiva. En esta otra carrera Mariano Haro aspira a su quinta legislatura.
Juan Fernández -informa José Hermida- aprovechó la inmensa popularidad que le proporcionó ser presidente durante muchos años del OAR Ferrol de baloncesto para dar el salto a la política en 1989 y convertirse en consejero de Industria del primer Gobierno de Manuel Fraga en Galicia. Acabó peleado con el PP y ahora encabeza una candidatura independiente al Ayuntamiento de Ferrol, en la que también figuran dos ex jugadores del OAR Miguel Loureiro y Luis Saldaña.
El equipo ONCE Igualada, campeón de Liga y de la Copa de Europa de hockey patines, presenta un caso curioso: dos de sus jugadores se presentan a las municipales de la localidad, David Gavaldón lo hace en la lista de CiU en el puesto número 10, mientras que su compañero de equipo Xavier Gimeno lo hace en la lisa del PSC.
El piragüismo español también tiene su representante. El campeón del mundo Juan José Román Mangas aspira a entrar en el Ayuntamiento de Zamora con el Partido Popular. La Concejalía de Deportes será su destino si el PP logra la victoria.
Una medalla -bronce en 400 metros en el Mundial de Tokio 91- bien vale un número, el 20, en las listas del PP en las elecciones de la Comunidad de Madrid. Una estadounidense nacionalizada española, Sandra Myers, es uno de los pocos reclamos femeninos para la carrera política encontrados en el deporte.
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