3.500 lazos, una canción y Anabel Segura
Una canción resonó ayer entre la juventud quese congregó en la discoteca Paladium de Coslada (79.250 habitantes) en protesta por el secuestro de Anabel Segura. "Soy inocente. La culpa no es mía. El malo eres tú", repetía el estribillo.
Tres mil quinientos jóvenes, que llevaban prendidos en el pecho lazos amarillos, pedían con este acto la liberación de Anabel, la joven secuestrada hace más de dos años en La Moraleja, barrio residencial de Alcóbendas.
La idea partió de Patricia, una niña de 11 años que escuchaba un programa de Onda Cero donde todos los sábados dedican una canción a la joven de Alcobendas. Patricia pensó que reunir en una gran fiesta a los muchachos madrileños que quisieran solidarizarse con Anabel le ayudaría a aguantar el secuestro. Temblorosa, leyó ante los jóvenes una carta que ella misma había escrito: "Que vuelvas pronto. Los que te tienen secuestrada deben entender que a ellos también les gusta estar en casa". Manuel Segura, tío de la secuestrada, emocionado, terminó: "La juventud lo puede todo". Tres mil quinientas voces les aplaudieron.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
