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Aves fariseas

500 parejas de avión común; expulsadas delpórtico de la Almudena

Más de 500 parejas de avión común han visto malograda su luna de miel. La Iglesia no aprueba la atrevida ubicación, en el pórtico principal de la catedral de la Almudena, de los nidos de amor dé la mayor colonia madrileña de esta especie de ave insectívora. Durante el invierno, antes de que los plumíferos regresaran de su periplo africano, los responsables de la, seo madrileña destruyeron el medio millar de hogares.Su pecado, sin. atisbo de arrepentimiento, era indecoroso: las pulcras pero alevosas crías arrojaban fuera del nido sus excrementos mancillando a los viandantes madrileños y dañando el edificio. La penitencia ha sido rígida: la expulsión definitiva, más severa que la que Jesucristo infligió a los fariseos en el templo, pues no les prohibió el futuro acceso. "Era patético ver cómo los pájaros desahuciados, en plena parada nupcial, intentaban acceder al que había sido su hogar durante más de 15 años, pero se topaban con una

extensa malla metálica", asegura el naturalista que ha denunciado el desalojo, el periodista de 32 años Luis Miguel Domínguez, habitual contertulio del programa de la SER de Iñaki Gabilondo.

El avión común (Delichon urbica) es pariente de las golondrinas y de los vencejos. Los de la Almudena capturaban insectos al vuelo en los cercanos jardines del Campo del Moro (en el palacio Real) y en el río Manzanares. Para más irreverencia, estas aves tienen un obispillo blanco, nombre científico de la rabadilla.

Los aviones, empeñados en formar una familia tradicional,, han volado ahora ala búsqueda de una vivienda menos inhóspita. Domínguez, autor de la serie de televisión Fauna callejera (que incluyó a las inquilinas de la Almudéna en un par de capítulos), se topó con que muchas de las pare

jas habían comenzado a construir, a base de pe- . llas de barro, sus nidos en la plaza Mayor.

"Es un atentado ecológico urbano", aseguró ayer Fernando Barrio, portavoz de la Sociedad Española de Ornitología (SEOBirdlife); "estas aves beneficiosas no están en peligro de extinción, pero sí protegidas". La SEO estudia denunciar el desahucio. Mientras, el Ayuntamiento de Madrid y la Agencia del Medio Ambiente regional no se ponen de acuerdo sobre quién tiene las competencias sobre unos animales salvajes pero urbanos.

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Los responsables de la catedral no han querido hablar del tema. "No tengo nada que comentar", dijo ayer Mateo González Camarma, deán de la seo madrileña. "Eso pasó hace meses"; espetó, "y se ha agotado toda la conversación sobre el particular".

"La verdad es que sí que han manchado algún vestido elegante, pero esto es una muestra de una insensibilidad absoluta", reitera Domínguez; "esto no pasaría en un templo hindú o musulmán".

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