"El Pardo acerca la naturaleza salvaje a las puertas de Madrid"

Miguel Ángel Acero, biólogo madrileño de 29 años, se ha paseado de puntillas por los enclaves salvajes de la Comunidad de Madrid desde que cumplió los 14. Pocos rincones naturales han escapado a la curiosidad aventurera de este ecologista que acaba de publicar su primer libro en solitario -ha sido coautor de otros cuatro-. Se trata de Madrid a la búsqueda de su naturaleza, un inventario de todos los espacios protegidos de la región. Para ayudar a los excursionistas neófitos, Acero ha incluido en la guía 25 itinerarios verdes. Unas rutas respetuosas que se adentran con el mismo espíritu de admiración en La Pedriza como en los desconocidos cortados yesíferos de Rivas-Vaciamadrid, unos áridos acantilados labrados por el Jarama donde reina el halcón peregrino.Pregunta. ¿Dónde nació su afición a la naturaleza?

Respuesta. Descubrí la naturaleza con los documentales de Félix Rodríguez de la Fuente. Luego, en el colegio San Buenaventura formamos un club de escalada y nos íbamos a La Pedriza.

P. También se inició en el mayor pulmón urbano.

R. Sí, siempre he vivido cerca de la Casa de Campo, donde he jugado desde pequeño. Incluso en 1.992 publiqué con un amigo, Luis López Vázquez, una Guía de la Casa de Campo.

P. ¿Qué paraje descubriría a los madrileños?

R. Los humedales que se han formado en las canteras de las riberas del Jarama, a su paso por Arganda. Ahora son un paraíso de aves. Y a sólo una hora de marcha de Peñalara hay un rincón poco visitado y más bonito: la laguna de los Pájaros.

P. ¿Qué hay en el sur?

R. Yo destacaría la Reserva Natural de El Regajal-Mar de Ontígola. Todos los años, entomólogos europeos estudian allí las mariposas madrileñas.

P. ¿Peligra El Pardo?

R. Debería tener alguna figura de protección. Ahora se puede cometer un atentado ecológico sin que la Comunidad pueda evitarlo. Ver los encinares de El Pardo con la ciudad al fondo es un paisaje maravilloso. Con él, la naturaleza se acerca salvaje hasta las puertas de Madrid.

P. ¿Ha aumentado la conciencia ecológica?

R. Entre los jóvenes sí, pero es difícil cambiar los hábitos de los mayores. Hace poco tuve que impedir que dos ancianos apalearan a una culebra en el embalse de Santillana.

P. Aconseje una ruta para el fin de semana.

R. Es casi un paseo. Un itinerario llano de siete kilómetros junto al embalse de Picadas por una vía de tren, la de Algodor (Toledo), que nunca llegó a funcionar. Las jaras estarán ahora florecidas. ¡Un paisaje colorido y olorido!

Madrid a la búsqueda de su naturaleza. Libros Penthalon. Precio: 1.800 pesetas.