Diez años de Plan

El pueblo de los solteros, Plan, en el Pirineo de Huesca, ya no es lo que era hace 10 años, cuando los mozos decidieron que el mundo se enterase de que necesitaban mozas. A raíz de la caravana de mujeres que en la primavera de 1985 desembarcó en tres autobuses, se formaron 42 parejas, de las que 12 se quedaron en el valle.De su fruto han nacido hasta el momento docena y media de críos y crías y la nómina de solteros y solteras, que algunas hay, se compone ahora de algo más de un centenar de miembros. Este fin de semana se celebra una gran fiesta para conmemorar la primera de las cinco convocatorias que de alguna manera han supuesto la transformación de la vida en la zona,

El último temporal de nieve acaba de volver a blanquear las praderas del Valle de Chistau o Gistain en la comarca del Sobrarbe. Los pequeños pueblos que se agolpan en las laderas de montes de más de 3.000 metros de altura: Plan, San Juan de Plan, Gistain, Sin... parecen de cuento. Tras ascender por la angosta carretera (ahora por lo menos bastante bien asfaltada) que conduce al final del valle, se llega a uno de los lugares aún cuasi vírgenes del Pirineo, donde el turismo no ha desembarcado.

El paisaje 10 años atrás era muy parecido. Sólo la carretera que llega desde Barbastro (interminables decenas de kilómetros aguas abajo del Cinca), denota el paso del tiempo. La electrificación y el teléfono (aún a precio de oro para algunos de los núcleos más apartados) son quizás otros de los símbolos de esta evolución.

Una década se ha escapado ya desde que Marian, que ahora tiene tres hijos (uno nacido en Plan) llegara con otras decenas de mujeres en busca de una aventura vital, pero también de un cambio radical en su vida.

Su marido, Mariano, sigue teniendo que ocuparse de la vacas, como entonces (ahora tiene 16) y ambos, tras convertirse en la primera consecuencia matrimonial de la caravana, han dado la vuelta al mundo para contar ante las televisiones más variadas su historia. Todo empezó cuando sus convecinos vieron en enero de 1985 la película en la que un grupo de solteros decide reclamar la presencia de mujeres para poblar una zona del oeste nortemericano. Los tiones decidieron hacer lo mismo. Pusieron un anuncio en la prensa regional.Las preocupaciones de los chistavinos ya no son las mismas, aunque aún queden maciellos (solterones), curiosamente algunos de los mismos que estuvieron en la génesis de la idea. Ahora la modernidad les permite, salvo muy pocas fechas al año en que la carretera se queda cortada, salir a buscar compañía por los pueblos fuera del valle, y las visitas de foráneos (as) han abierto más la oferta de relaciones.Los desvelos están más en luchar contra los intentos de agredir a su idílico valle con una autopista transpirenaica, que sólo defienden los intereses particulres de las hidroeléctricas y algún ex dirigente regional socialista. Sigue pendiente el problema de la despoblación, pese a que la escuela tiene ya 18 niños, entre los nacidos y los llegados, pero como dice Marian "los chiquillos no quieren ni oír hablar de las vacas". La dureza del trabajo rural y los problemas para desarrollar las agricultura y ganadería de montaña tras las obligaciones de la UE añaden un gravamen al futuro.

Hasta el hijo mayor de Marian, que vino con ella desde su Madrid natal y ahora estudia el final de la enseñanza preuniversitaria en Huesca capital, Iván, a sus 17 años, parace tener claro su diagnóstico. Dice que las relaciones ahora son otra cosa y defiende para el valle la necesidad de que se promocionen los oficios tradicionales y relacionados con la artesanía, para permitir un desarrollo controlado del turismo que impida que la vida se apague.

Los protagonistas de hace dos lustros han decidio repetir este fin de semana la fiesta. No ha habido necesidad de poner como entonces aquel anuncio: "Se necesitan mujeres entre 20 y 40 años con fines matrimoniales para pueblo del Pirineo aragonés. Se atiende por teléfono". Ahora la propaganda ha sido gratuita y además los fines - "aunque nunca se sabe", dicen en el bar de Plan donde entonces se fraguó la operación- no son los mismos. Se pretende, aprovechando el puente del 1 de Mayo, organizar un festejo por lo que fue "todo un acontecimiento mundial".

La fama hizo a los de Plan más socarrones, algo desconfiados con "los periodistas que han explotado, mintiendo descaradamente, esta historia", y también más sociables y más conscientes de que la lucha colectiva trae mejores resultados que el individualismo.