González: "Si me apoyais, yo aguanto y seguiré dando la lata mucho tiempo"

El líder del PSOE, Felipe González, dedicó el viernes y el sábado a su partido, visitando a jóvenes, inaugurando casas del pueblo, presentando candidatos y homenajeando al histórico Curro López Real."Pasa el tiempo y me sigo sintiendo de izquierda, y así será mientras haya una desigualdad por la que luchar". Esto dijo anoche en Nerva (Huelva). Horas antes, en Coria (Sevilla), había asegurado que sigue siendo, "el mismo de 30 años atrás". González tuvo una experiencia que no vivía desde hacía muchos años: pasear por las calles y ser achuchado, abrazado y besado. "Si me apoyáis, yo aguanto y seguiré dando la lata mucho tiempo" dijo.

Gónzález se quejó ayer de que se tarea le viene resultando muy dura" al tener que soportar "tanta infamia y tanta mentira", pero enseguida retomo el optimismo: Llevo mucho tiempo en esto. Tengo 53 años y más cabinas, pero también más experiencia y soy el de hace 30 años. Si me aguantáis y vosotros aguantáis, yo también aguanto".Inmerso en el emotivo recibimiento que le dispensaron en Coria a ritmo de palmas y con frecuentes olé, olé, el presidente del Gobierno se dejó llevar. "Si no me falta vuestro cariño voy a seguir dando la lata a esta gente por mucho tiempo. El PSOE no está acabado", advirtió.

El secretario general socialista pasó dos días entre las provincias de Sevilla y Huelva de dicado por completo a los mili tantes de su partido. Habló mucho de ideas, de la diferencia entre izquierda y derecha y de la necesidad de mantener un proyecto como el que, dijo, en carnába el PSOE. Pero más que política hubo elementos pro pios de actos masivos en los que el sentimiento pesa más que la razón. Quien se llevó todos los elogios y todos los aplausos fue el histórico Curro López Real, un hombre que lleva invitando en el PSOE 65 años y al que ayer González, Guerra, Manuel Chaves y Ramón Rubial homenajearon en la cuenca minera onubense.

La satisfacción entre los militantes era evidente al ver sentados juntos a González y Guerra, ambos haciendo bromas del viento helador que corría por el parque municipal de este pueblo.

La persistencia de López Real en sus convicciones socialistas le sirvió a Felipe González para considerar mínimas las dificultades por ' las que ahora pasa el PSOE en comparación con el dramatismo de la vida de un socialista que ha pasado por el exilio y la persecución. Cómo se puede hablar de dificultades cuando todavía tenemos miles de concejales y de alcaldes y el Gobierno de la nación, aunque es verdad que la derecha se ha crecido y cuenta con esos que, como el perro del hortelano, ni comen ni dejan comer", dijo en implícita referencia a Izquierda Unida.

González aseguré que no ha perdido el ánimo. "Pasa el tiempo y me siento de izquierda, soy moderado, pero seré de izquierda y defenderé nuestro proyecto en tanto que haya una desigualdad por la que luchar". Dicho esto, el líder socialista pidió a los jóvenes candidatos a alcaldes de su partido que expulsen a todos los deshonestos.

En todas sus intervenciones, -en Nerva y, hora antes, en Coria y Santiponce-, el presidente del Gobierno reiteró a los suyos que no hagan caso "a los que dicen que el PSOE vive final de etapa o final de ciclo", porque su proyecto, aseguró, sigue vigente. "Hay gente que dice que nuestro proyecto está agotado y se equivocan, el socialismo democrático no se puede agotar, ya que no tiene estación de llegada".-

"Mientras haya una injusticia por la que luchar, siempre habrá socialismo democrático", enfatizó sin perder su tono de humor. Y apuntilló: "No Podemos permitir que haya marcha atrás".

Todos los miembros del partido estaban pendientes del trato que se dispensarían González y Guerra al coincidir en Nerva. Guerra no le acompañó el viernes ni durante la mañana del sábado en los actos sevillanos, a pesar de que todo el mundo sabía que el número dos ya estaba en la capital. Cuando se encontraron los militantes agrupados en el parque de Nerva sonrieron satisfechos. Ambos dirigentes charlaban animadamente y Felipe González citó a Guerra durante su intervención en tres ocasiones.

El vicesecretario general del PSOE dejó las referencias más políticas para González, aunque no pudo evitar hacer alguna mofa de la derecha al hablar de los 65 años de militancia de Lopéz Real. "Éstos de la derecha que hacen un partido cada año no sabemos dónde tendrían que ir para homenajear a alguien con 65 años de militancia; seguramente irían al Parque Jurásico".

El acto de Nerva, terminó con el propio Curro López Real, que recordó la coplilla con la que había felicitado a Felipe González en su último cumpleaños. "Yo soy como aquel barquito que cuanto más golpes le van dando, más fuerte le van dejando".