_
_
_
_
_

Di Pietro, cree "inmoral" explotar políticamente su prestigio

Antonio di Pietro, el ex fiscal símbolo del prestigio de la magistratura italiana, en la que formalizó el pasado lunes una dimisión anunciada el 6 de diciembre, afirmó ayer que considera "inmoral utilizar el prestigio" por él adquirido en la lucha contra la corrupción "para adquirir méritos políticos de los que", añade, "no he dado ninguna prueba".Di Pietro quiso desmentir con esta frase, de una vez para siempre, los rumores interesados, propagados últimamente sobre todo por las fuerzas de la derecha, de que está próximo a emprender una carrera política. "Si realmente hubiera de invadir algún campo ajeno, es posible que me llamara más el periodismo que la política", añade.

El ex fiscal escribió estas frases en un artículo publicado por el diario La Stampa, con el que ha iniciado una colaboración fija como columnista. "El sistema político debe buscar a sus propios líderes en la sociedad civil entre las personas más competentes, y no simplemente entre las más populares ( ... ). Cualquier profesión, incluso la de político, debe ser afrontada escalón por escalón, y no aprovechando consensos adquiridos en otros campos", escribe también Di Pietro.

"Mi presencia crearía sólo desequilibrios en la balanza electoral, al cargar de una parte o de otra el peso de una popularidad que deriva de motivos ajenos a la política", continúa. "Podría desplazar pesos y alterar juegos, sin que haya sido demostrada, una competencia específica mía".'

Esta salida de Di Pietro ha sido un jarro de agua fría para la derecha, que ya contaba al célebre ex fiscal en sus filas. Tras conocerse su dimisión del lunes, Gianfranco Fini, líder de Alianza Nacional, había asegurado que la entrada de Di Pietro en política no cambiaba el hecho de que Silvio Berlusconi fuera a seguir siendo el líder de Forza Italia. Pero la columna de ayer de Di Pietro era, sobre todo, una descalificación explícita de la rutilante carrera política del líder de Forza Italia, que el martes había vuelto a entrar en polémica con los ex colegas de Di Pietro que le investigan en la Fiscalía de Milán, tachándoles de comunistas.

El momento político italiano sigue, con todo, centrado en las elecciones administrativas del próximo día 23, y en la exigencia de Berlusconi y los suyos de que se celebren elecciones generales antes de julio.

Todo! los grupos del centroizquierda, desde los ex democristianos hasta el Partido Democrático de la Izquierda, presentaron ayer una plataforma de temas como la reforma de las pensiones y la ley contra la concentración de medios de comunicación, que, a su juicio, deberán ser resueltos antes de volver a las urnas.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_