LIMPIA GIRA
La gira de Hillary Clinton por el sureste asiático está teniendo efectos benéficos e inesperados en algunas de las ciudades que visita. Por dondequiera que está previsto que pase la primera dama, las calles se llenan de obreros encargados de asfaltarlas, limpiarlas y ocultar los montones de basura acumulada. Los miembros de las embajadas estadounidenses en Pakistán y la India han asistido maravillados al nuevo paisaje urbano que ha sustituido al tradicional de las ciudades del Tercer Mundo. Así, en las carreteras paquistaníes por las que iba a pasar Hillary Clinton aparecieron unas vallas que ocultaban chabolas y vertederos. Incluso el rumor de que podía visitar las colinas de Margalla hizo que se asfaltaran inmediatamente unos 17 kilómetros de carretera que los nativos venían pidiendo sin éxito desde hacía años. Sin embargo, los planes originales se cambiaron y la primera dama jamás pasó por allí. Incluso la Embajada americana en Nueva Delhi se ha visto agitada por la misma pasión, y la esposa del embajador Frank Wisner hizo venir a un artista mural desde el extranjero para redecorar el salón comedor de la residencia.-
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