Guerra abierta de Yeltsin con el alcalde de Moscú
El alcalde de Moscú, Yuri Luzhkov, amenazó ayer con dimitir si no se repone en sus cargos a los jefes de la policía y de la fiscalía de la capital rusa. El asesinato del periodísta VIadislav Lístiev ha servido de pretexto para destituir a ambos. dirigentes y asestar otro golpe a Luzhkov, quien, según los observadores, es el verdadero blanco de una nueva campaña instigada por el entorno del líder ruso, Borís Yeltsin. Éste, convencido de que Luzhkov tiene ambiciones presidenciales, ha decidido tomar medidas contra él, desatando una crisis política de imprevisibles consecuencias.
Luzhkov se ha dirigido a Yeltsin, al Ministerio del Interior y a la Fiscalía General pidiéndoles que revoquen la destitución del general VIadímir Pankrátov y del fiscal Guennadi Ponomariov. Si estos hombres de confianza suyos no son repuestos dimitirá, amenazó ayer el alcalde, y advirtió que no descarta la posibilidad de recurrir a los tribunales -ya que considera ilegal el cese de ambos dirigentes- si el presidente desatiende su petición.Esto significa que Luzhkov ha recogido el guante que Yeltsin le lanzó, y que si el presidente quiere guerra, la tendrá.
El influyente diario Segodnia -que pertenece al grupo financiero Most, relacionado con Luzhkov- acusa de instigar la campaña contra el alcalde a dos importantes empresarios: Borís Berezovski, jefe de la firma comercializadora de coches Logovaz, y.Oleg Boiko, que desea que su banco, Crédito Nacional, remplace a MostBank como banco oficial de la alcaIdía. Y el principal organizador de las acciones contra Luzhkov, según Segodnia, es Alexándr Korzhakov, jefe de la Seguridad de Yeltsin. Fueron los agentes de este general los que a fines del año pasado bloquearon la sede de Most-Bank, incidente que costó el puesto a Yevgueni Savostiánov, jefe del Servicio Federal de Contraespionaje (SFC) de Moscú, otro hombre clave del alcalde.
El diario oficial gubernamental, Rossiískaya Gazeta, por su parte, arremetía ayer contra VIadímir Gusinski, presidente de Most-Bank y principal aliado financiero de Luzhkov. El periódico acusaba a Most-Bank de haber violado la ley y a Gusinski, de haber timado por lo menos a dos personas, que en su momento recurrieron a los tribunales pero después retiraron sus acusaciones ante la presión de unos policías amigos del banquero. La reacción de Gusinski no se hizo esperar y ayer Most-Bank divulgó una declaración en la que califica de "libelo"- el artículo, y su publicación, una "nueva provocación política". El banquero dijo que llevaría a juicio al diario.
Mientras, quienes pensaban que las autoridades podrían aprovechar el asesinato de Lístiev para convertir al país en un Estado policial ven confirmados sus temores. Después de que el Consejo de Seguridad dictaminara el lunes que la criminalidad amenaza al Estado, el Ministerio de Interior aplicó una decisión del año pasado, según la cual en cada distrito de Moscú se desplegarán unidades motorizadas que alcanzarán los 10.000 hombres. Oficialmente el número de soldados que combate en Chechenia ronda esta cifra.
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