Cuatro policías escoltarán a Roldán en la cárcel para evitar un atentado
El Gobierno teme que Luis Roldán pueda ser víctima de un atentado. Para evitarlo, la secretaria de Estado de Asuntos Penitenciarios, Paz Fernández Felgueroso, dispuso ayer que un grupo de cuatro policías armados esté día y noche en el módulo de cinco celdas que ocupará el ex director general de la Guardia Civil. Será el solitario de la cárcel de Brieva. Fernández Felgueroso explicó que tal determinación ha sido adoptada conforme a lo dispuesto por la Ley Orgánica General Penitenciaria.
La decisión ha sido comunicada a la comisión de Justicia e Interior del Congreso y a la juez de Instrucción número 16 de Madrid, Ana Ferrer.Roldán estará en régimen de prisión comunicada y podrá hacer vida normal, sin que la especial protección suponga para él "suspensión o limitación alguna de los derechos que tiene reconocidos". En consecuencia, podrá recibir visitas y entre ellas la de su esposa, Blanca Rodríguez Porto.
Según fuentes de Asuntos Penitenciarios, Luis Roldán se encuentra bien de salud y "no padece ningún tipo de depresión", como han dejado de manifiesto los diversos reconocimientos médicos a que ha sido sometido desde que llegó ayer a España. Los encargados de su custodia no temen que Roldán pueda atentar contra su propia vida, sino que la mayor preocupación es que pueda ser víctima de un ataque para callarle la boca.
El síndrome del atentado planeó ayer durante todo el día y eso obligó al Ministerio de Justicia e Interior a adoptar especiales medidas de seguridad en torno al detenido.
El ex director general de la Guardia Civil, Luis Roldán, entró en la cárcel abulense de Brieva a las 17.41 horas de ayer en un vehículo Citroën Xantia, matrícula M-8907-OS, de color verde oscuro y con los cristales tintados. Le seguían otros cuatro vehículos y tres motos. Brieva es pequeña localidad que pertenece como barrio al Ayuntamiento de Ávila, informa Carlos de Miguel.
Muchos curiosos
En el instante que pararon los vehículos para que se abriera la verja de la prisión, algunos de los muchos curiosos que se acercaron a la cárcel, situada a siete kilómetros de la capital, consiguieron ver a Roldán.
"En el momento en el que han frenado las motos y los coches, porque no habían abierto la verja de la cárcel, le he visto al trasluz de los cristales", relataba un joven en la puerta del establecimiento penitenciario. "Iba atrás, entre dos personas. Lo llevaban enmedio con barba y con gafas de sol".
Luis Roldán tendrá una celda de diez metros cuadrados, una de las cinco que hay para hombres en situación de carácter preventivo en la prisión de mujeres de Brieva
La celda en la que quedó ingresado el ex director general de la Guardia Civil tiene una cama, una silla, un armario, un lavabo y un retrete, además de un enchufe. Su cuñado, el abogado José Luis Rodríguez, le visitó ayer en este establecimiento penitenciarios.
En este centro penitenciario permaneció ingresada entre el 22 de junio y el 23 de julio de 1994 la esposa de Luis Roldán, Blanca Rodríguez Porto, que consiguió salir al pagar una fianza de 50 millones de pesetas.
El director de la cárcel, Jesús Martín Moreno, afirmaba a primera hora de la mañana de ayer que no había "nada preparado para nadie". "Aquí hay una prisión que está preparada para cualquier preso que venga con una orden del juez para ingresar", ha dicho el director, y añadió que "si me lo traen, será bien recibido".
Tras entrar en la cárcel, informó el director, Luis Roldán estará 24 horas en el departamento de ingresos para pasar una revisión médica "como cualquier otro preso". La esposa de Roldán permaneció durante toda su estancia en el centro penitenciario en el departamento de ingresos.
