_
_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Los técnicos también necesitan su entorno

Se reanudó la Bundesliga, tras dos meses de presunta pausa invernal. En la Alemania unificada ya ni los inviernos son lo que eran y ya casi nieva menos que en Sierra Nevada. Los dirigentes futbolísticos empiezan a plantearse si fue correcta la decisión de introducir dos meses de pausa entre la primera y la segunda vuelta. La afición padece mono de Bundesliga, que no puede resolver el sucedáneo del fútbol-sala, siniestro invento con que intentaron llenar los dos meses sin fútbol de verdad. La Bundesliga empezó tal como terminó antes de Navidad: con un líder intratable, el Borussia Dortmund, que le endosó un 1-5 al 1860 Múnich. El otro equipo de Munich, el Bayern, ganó fuera de casa 1-2 en Bochum con un excelente partido del ex-coruñés Kostadinov, que metió un gol, dio. excelentes pases y fue un peligro constante. Este búlgaro errante habló con los periodistas en español, pero, promete hacerlo muy pronto en alemán.Esto es algo que empieza a conseguir su entrenador, el italiano Giovanni Trapattoni, quien a base de infinitivos y gesticular con manos y pies ya consigue hacerse entender. ¡Demasiado tarde! Il maestro ya ha confirmado que a final de temporada regresa a Italia. Alemania ha sido demasiado para Trapattoni. El idioma ha resultado una barrera para transmitir sus ideas a los f'utbolistas, su mujer se aburría en Múnich y su hijo no consigue convalidar sus estudios. Trapattoni echa de menos los cafés, la discusión y la pasión que se vive en el calcio. Más o menos, como Romario con la playa.

Los entrenadores también tienen su corazoncito y necesitan un entorno adecuado a su trabajo. Por eso más de uno se pregunta si será adecuada la decisión del Bayern al contratar como sucesor de Trapattoni a Otto Rehhagel, actual entrenador del Werder Bremen. De momento, la decisión resulta de dudosa ética deportiva. En plena competición, el Bayern. ha fichado al entrenador de un competidor directo. El Bremen juega contra el Bayern en Múnich el último partido de la actual Bundesliga. ¡Menuda se puede organizar!, si del resultado de ese partido depende el título o, peor todavía, la clasificación para la Copa de la UEFA. ¿Para quién trabajará ese día Rehhagel?.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_