OTAN: ideas nuevas
Cinco años después de la caída del muro de Berlín, hay síntomas alentadores de que la OTAN está desarrollando respuestas imaginativas a los nuevos desafíos a la seguridad en el mundo. (...) Con razón o sin ella, en los países occidentales ganaba terreno la impresión de que la OTAN se mostraba incapaz de abordar crisis graves como la de Yugoslavia, o de adaptarse de forma, suficiente a los cambios del orden interna cional. ( ... ) Se trata, en concreto, de cuatro ideas específicas. La primera es la creación de una comisión permanente entre los miembros de la OTAN y Rusia, que discutiría la seguridad europea en general y crisis específicas como la de los Balcanes. (...) Es una iniciativa inteligente que justificaría la segunda propuesta: ampliar la OTAN admitiendo a la República Checa, Hungría, Polonia y Eslovaquia. La tercera idea es establecer alianzas de seguridad con países amigos y moderados en el norte de Africa y en el Mediterráneo oriental. ( ... ) La última ideal quizá la más audaz, es reorganizar la alianza entre Europa y Estados Unidos en una comunidad unida por lazos comerciales, monetarios, políticos y culturales, además de la actual relación militar. ( ... ) La OTAN tiene una especial responsabilidad en cuanto a encontrar respuestas a las cuestiones, que plantean los cambios revolucionarios del mundo en los últimos cinco años. Después de un principio incierto, hay razones para esperar que pueda estar dando respuestas acertadas. , 8 de febrero