CC OO revela que González se mostró dispuesto a pactar un calendario electoral

Felipe González se mostró dispuesto a pactar un calendario electoral con la oposición, según ha desvelado la resolución aprobada ayer en la ejecutiva de CC OO. En el escrito, en el que se da cuenta de la entrevista de los agentes sociales con Felipe González, se dice que "le apuntamos la conveniencia de aclarar un calendario electoral con los grupos de la oposición". Y el presidente "reconoció que efectivamente no sería suficiente el debate sobre el estado de la nación y que estaba dispuesto a reiterar su oferta de diálogo con la oposición en la dirección apuntada por nosotros".Calendario electoral por el que apuestan tanto CC OO como la patronal. La CEOE en su reunión de ayer se mostró más que favorable a que se establezca un calendario. Y UGT, que ayer difundía un cauto comunicado sobre el debate, sin pronunciarse por "la salida constitucional", tiene sus discrepancias sobre si pedir o no los comicios.

Nicolás Redondo, antiguo secretario general de UGT, no rechazaba el manifiesto suscrito por los agentes sociales, pero aclaraba que él quizá hubiera hecho "algo distinto". Redondo regañaba a los sindicatos por prestarse a ser "muletas" para sostener al Gobierno e insistía en que el ciclo socialista ha concluido y mantenerlo es malo para todos que en CC OO, por el contrario, hay unanimidad en pedir elecciones. Las discrepancias están en las formas. Y pueden apreciarse en la resolución aprobada ayer por la ejecutiva del sindicato, que hay que interpretar, sobre todo, como un intento de buscar sosiego en la propia casa. Para unos, hay que establecer un calendario electoral ordenado. Para otros, se impone la dimisión de González y la convocatoria inmediata de elecciones.

Las diferencias que han aflorado en estos días, no tanto dentro del sindicato -que ya eran conocidas- como en el seno de quienes reclaman la titularidad de la izquierda, han dado lugar a una resolución que pormenoriza, sobre todo, lo que el documento supone de crítica hacia el Gobierno y de estrategia reivindicativa hacia la patronal.

División de la izquierda

Para el sector de Agustín Moreno, más cercano a las tesis de IU, el manifiesto -y así lo hace constar en una resolución alternativa- ha sido un elemento de división para la izquierda. Y no ha supuesto éxito alguno en cambiar la política económica.Pero sí que coinciden ambos sectores en el escepticismo sobre los resultados del debate y el riesgo de que se convierta en una enumeración de corrupciones, escándalos y críticas políticas, sin que se aborde el problema de una recuperación económica lastrada precisamente por una exacerbación política.

Y aquí vienen los matices. Para Moreno, se impone la dimisión del responsable político, Felipe González, y, a continuación, elecciones. Ángel Campos, del sector más cercano al secretario general, está de acuerdo en que existe un riesgo de que el debate no se aproxime a los problemas de la economía real. Pero no aboga por una convocatoria inmediata, sino por establecer un calendario electoral ordenado.