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El grupo BBV elevó sus beneficios el 1,8% en 1994

El grupo Banco Bilbao Vizcaya (BBV) obtuvo el año pasado un beneficio neto (una vez descontados los destinados a accionistas minoritarios) de 72.330 millones de pesetas, lo que supone un aumento del 1,8% frente a los del ejercicio anterior. El presidente del banco, Emilio Ybarra, destacó ayer que la crisis política (en los momentos qué daba la conferencia de prensa no se había perpetrado el atentado de San Sebastián) puede perjudicar el proceso de recuperación económica. "Las previsiones económicas para 1995 son francamente buenas, pero han surgido hechos que están complicando la recuperación", dijo Ybarra, que precisó: "Se debe a un problema de confianza. generalizada de nuestro sistema ante la capacidad para reducir el déficit público". A ello se suma la incertidumbre política "aunque no soy yo el más indicado o experto sobre la realidad sociopolítica".El resultado consolidado neto (antes de descontar los minoritarios) fue de 86.643 millones, lo que significa un descenso del 0,3% frente al año anterior. A pesar de esta caída, el banco logró aumentar los beneficios que realmentemnte en sus arcas gracias a, que los que se llevan sus socios minoritarios (en sociedades que consolidan con el banco) también cayeron, un 9,4%.

El banco que preside Emilio Ybarra mejoró significativamente en los resultados de explotación, considerados los típicamente bancarios, que crecieron, un 13,5%. El margen financiero se elevó un 2,1% y el ordinario (suma del financiero y las comisiones que cobran los bancos) un 4,2%. Se puede afirmar, incluso, que el aumento de las comisiones (un 11,2%) ha dado un empujón importante al resultado de explotación. El banco también ha contenido los gastos de personal, que han aumentado un, 0,2% y, sobre todo, los generales, que han caído el 6,3%. El ratio de eficiencia (gastos de explotación sobre margen ordinario) ha mejorado de 57,6 a 54,1

Esa favorable evolución (reflejada en la primera parte de la cascada de resultados) se fue al traste en gran parte por las pérdidas que ha tenido el banco en operaciones financieras. El BBV tuvo unas pérdidas de 32.200 millones, provinientes de su intermediación en deuda a largo plazo. El año anterior obtuvo unos beneficios de 50.400 millones en este capítulo, por lo que la caída es superior a los 82.000 millones. La depreciación de la cartera del grupo obligó a unas dotaciones para sanear la cartera por valor de 8.771 millones. La morosidad se sitúa en el 4,7% mientras el saneamiento crediticio descendió de 92.000 a 78.000 millones.

El BBV propondrá en su junta general de accionistas del 25 de febrero el reparto de un dividendo de 174 pesetas por acción, lo que supone un total de 40.194 millones frente a 39.039 millones de 1993. El resto, 32.136 millones, se destinan a reservas.

Emilio Ybarra basa el futuro de la entidad en el denominado Programa 1.000 días, según el que los beneficios antes de impuestos del BBV serán de 175.000 millones en 1997 frente a los casi 115. 000 de 1994. El citado programa prevé la apertura de 250 oficinas, rejuvenecer la plantilla, optimizar la estructura del capital, mejorar la rentabilidad y nuevos negocios.

En este último punto, destaca el interés mostrado por Ybarra en el sector de telecomunicaciones. Según Ybarra, que reconoció que la pérdida del concurso de telefonía móvil por parte del grupo que necabezaba el BBV había sido "un duro golpe", el banco apuesta por entrar con Telefónica no sólo en telefonía móvil, "sino también en el otros campos de la telecomunicación".

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