Juan Pablo II tiende "la mano de la amistad" a los budistas de Sri Lanka

Juan Pablo II tendió ayer "la mario de la amistad" al pueblo de Sri Lanka (isla de Ceilán) y en particular a los budistas, que le acusan de haber, insultado a su religión. El Papa llegó ayer a Colombo, la capital del país, en una breve visita de 24 horas, la última etapa de su gira asiática. El 70% de la población de Sri Lanka practica el budismo, y alrededor de un 7% es católica.Juan Pablo II dijo en su primer discurso con motivo de la ceremonia oficial de bienvenida: "Deseo que mi visita sea considerada como una señal de mi profunda consideración por los fieles del budismo". Y mencionó específicamente los cuatro grandes, valores de esa religión: metta, karuna, mudita y upekkha (amor, compasión, simpatía y ecuanimidad), Miles de personas se concentraron a lo largo de los 30 kilómetros de la ruta papal desde el aeropuerto a la capital, a pesar de las protestas de los budistas, que estuvieron ausentes en la ceremonia de bienvenida en el aeropuerto.

El Papa, visiblemente cansado, descendió lentamente las escalerillas del avión que le trasladó desde Australia a Sri Lanka, y fue recibido por la presidenta Chandrika Kumaratunga, de religión budista, y por la primera ministra Sirima Bandaranaike, madre de la presidenta.

"Espero ardientemente", dijo el Pontífice dirigiéndose a los budistas en un evidente deseo de apaciguar los ánimos, que mi visita reforzará los vínculos entre nosotros y consolidará la voluntad de diálogo y cooperación inter religiosa de la Iglesia catolica".

El Papa señaló también q ue la ceremonia de beatificación del padre Joseph Vaz (su principal objetivo en esta visita pastoral), que presidirá hoy por la mañana, "más que un acontecimiento católico constituye al mismo tiempo un homenaje sincero a las profundas tradiciones religiosas del conjunto del país".

El clero budista anunció su intención de boicotear las ceremonias de la visita papal y lanzó una activa campaña para obtener disculpas del Pontífice por consideraciones calificadas de hostiles al budismo y contenidas en su libro Cruzando el umbral de la esperanza, Los líderes religiosos del país mantienen que el libro representa un insulto al budismo en algunas de sus páginas al presentar su religión como negativa y atea.

La guerrilla tamil

El Papa, al margen del tema budista, hizo un llamamiento a favor de la paz y pidió el fin de los combates entre la guerrilla tamil y las tropas gubernamentales. Al dar la bienvenida al Pontífice, la presidenta Kumaratunga dijo que el Gobierno tiene como alta prioridad conseguir la paz, y añadió que había iniciado un alto en las hostilidades con las guerrillas tamiles hace dos semanas. "Nuestra más ferviente esperanza es que el proceso de paz iniciado tenga como resultado una solución duradera del conflicto que propicie una era de tranquilidad y prosperidad en todos los sectores de nuestra sociedad y en toda la isla".

La seguridad en torno al Papa es extrema. Unos 15.000 policías han sido desplegados durante la breve visita de Juan Pablo II. Las fuerzas de seguridad mantienen una vigilancia especial en torno a la guerrilla tamil y a los extremistas budistas, aunque nadie ha lanzado ninguna amenaza directa contra el Papa.