El Barcelona gana su primera Copa Asobal derrotando al Teka
El Barcelona superó al Teka por 30-22 y se anotó el único título nacional que faltaba en su palmarés. La Copa Asobal se le resistía. Sólo una vez había llegado la final, el año pasado, pero el Granollers le derrotó y ganó de aquella forma su primer título en más de 15 años. Ayer, en Vigo, el equipo de Valero Rivera alargó su historial y le añadió una nueva corona. La consiguió frente al actual campeón de Liga y de la Copa de Europa.Los azulgrana encontraron las mayores dificultades durante la primera mitad. Fue allí donde los hombres del Teka dieron su máximo rendimiento. Dirigidos por el ruso Duishevaev y con la inspiración de Jovanovic, los santanderinos se cerraron en una defensa en 6-0 y lanzaron poderosos ataques sobre el portal defendido por Barrufet. A los 18 minutos de juego su ventaja era de 8-5. Y hasta cinco minutos del descanso fueron ellos quienes dominaron el tanteador. Pero el Barcelona recuperó el terreno perdido y entró en el vestuario con una tímida diferencia de un gol a favor (14-13).
Sin embargo, el decorado fue otro en la segunda mitad. Un acertado David Barrufet, que se está acreditando como uno de los mejores porteros de España, y el polaco Bojdan Wenta camiaron el rumbo del encuentro. Fueron el revulsivo que necesitaba su equipo -que había perdido en sus últimos tres enfrentamientos con el Teka- para perder el miedo escénico y lanzarse sin complejos hacia la victoria.
Apoyados en estos dos puntales, los jugadores del Barcelona recobraron la confianza tan rápidamente como la perdían los lanzadores santanderinos. La sólida defensa del Teka se fue desplomando y dejó los huecos necesarios para las penetraciones del Barcelona o para que el pivote pudiera recibir buenos balones. Y en la zona defensiva, el equipo de Valero Rivera volvió a adquirir la solidez que hace unos años le permitió ganar cinco ligas consecutivas.
Las diferencias fueron aumentando y el Barcelona se coloco en una sólida posición (2015). Poco importó que después, a los 14 minutos de juego del segundo tiempo, Wenta tuviera que retirarse de la pista lesionado. La máquina azulgrana había empezado a funcionar y el Teka no encontraba la forma de batir a Barrufet. El portero azulgrana se convirtió en un muro que a duras penas pudieron perforar Iakimovic y Jovanovic, los dos mejores lanzadores santanderinos. Estas nuevas premisas acabaron por desequilibrar a los cántabros, que vieron cómo el encuentro se les escapaba de las manos. El Barcelona logró su mayor distancia en la parte final, cuando se situó a ocho goles.
El Teka, que había disputado la final de las tres primeras ediciones de la Copa Asobal y ganado las dos primeras, perdió en su cuarto intento. Y el Barcelona rompió, de esta forma, una racha negativa con el equipo cántabro que empezaba a ser preocupante. Esta victoria puede elevar la confianza del Barcelona en la Liga, donde lucha con el Elgorriaga por el liderato.
