Poca credibilidad

La corona sueca, candidata a formar parte del Sistema Monetario Europeo pero no, de momento, de su mecanismo de cambios, ha sido la moneda europea que más ha sufrido esta semana junto a la peseta y la lira. La razón: la poca credibilidad en el nuevo, Gobierno socialdemócrata para hacerse con el control del desbocado déficit público. De hecho, los mercados recibieron mal el presupuesto de 1995 que pretende ahorrar cerca de 22.000 millones de coronas presentado hace unos días al Parlamento sueco (Riksdag) por el ministro de Finanzas del gobierno socialdemócrata, Göran Perssod Los ajustes más importantes han quedado aplazados a l997. La corona sueca se precipitó a la baja y cerró la semana con una depreciación del 4% contra el, marco (4,898 unidades por cada moneda alemana). El nuevo presupuesto propone un plan de ajuste que afecta desde las asignaciones familiares y las pensiones hasta las finanzas de la casa real. Se revé una disminución del déficit fiscal del 13% del PIB al 7% en 1996, un crecimiento de la economía de entre el 2,5% y3% en los próximos dos años y una inflación que no superaría el 3%. No obstante estos ahorros, el Gobierno anunció ya que en 1997 habrá un nuevo ajuste.