Violenta manifestación en Vigo contra la planta de basuras
Un explosivo secciona tres dedos al joven que lo empuñaba
Un joven de 24 años perdió tres dedos de la mano derecha al estallarle un cohete que pretendía tirar a la policía en los enfrentamientos, ya cotidianos desde hace mes y medio, del barrio vigués de Guixar. Una periodista fue apaleada por los agentes otras tres personas resultaron heridas. El conflicto, motivado por la instalación de una planta de transferencia de basuras, se ha crispado de nuevo en los últimos días.
El vecindario no ha cejado en su oposición violenta, a las obras de la citada planta de basuras desde que comenzaron hace mes y medio. Ya no queda rastro de mobiliario urbano en el barrio y cada día, desde última hora de la tarde y a veces hasta la madrugada, se reanudan los enfrentamientos de manifestantes y policía. Los vecinos recurren a los petardos, piedras y bolas de acero, a los cortes, de tráfico en zonas neurálgicas de la ciudad, a las barricadas, que ocasionalmente incendian, y al lanzamiento por las ventanas de objetos contundentes contra la policía, que utiliza de vez en cuando porras y botes de humo.El jueves por la noche, a Manuel Álvarez Ribera, le estalló el petardo en la mano. Perdió, los dedos índice, medio y parte del anular, además de sufrir graves lesiones en el resto de la mano. Algunos agentes de la policía y manifestantes se sumaron a una tácita tregua para buscar por el suelo, a la luz de linternas, los restos de los apéndices amputados por el cohete por si podían serle reimplantados, pero estaban destrozados. En el policlínico de Vigo al que fue traslado fue intervenido con éxito, pero ayer, y hasta que no transcurran dos semanas, no se descartaba que finalmente perdiera toda la mano a causa de una trombosis vascular.
Soledad Soler, periodista de Onda Cero que cubría la información de los incidentes, ha presentado denuncia contra la Policía Nacional por agresiones, insultos y amenazas. Según su relato de los hechos, se hallaba en un grupo de periodistas y vecinos que se disolvió a la carrera ante la presencia de la policía; sólo se quedaron en el lugar ella y un fotógrafo. El fotógrafo levantó la cámara, identificándose como periodista, y ella hizo lo mismo. Los, agentes soslayaron al fotógrafo, pero ella fue arrinconada, en un portal por cuatro agentes antidisturbios que la emprendieron a porrazos al tiempo que la llamaban "hija de puta" y la instaban a que corriera. En el hospital le apreciaron contusiones múltiples en piernas, glúteos y región lumbar. Ayer sufrió una hemorragia por las lesiones renales.
La protesta de este barrio contra la planta de transferencias de basura comenzó en noviembre pasado. Los vecinos sostienen que dicha planta afectará al medio ambiente.
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