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La falta de candidatos aboca al PSOE a presentar a los derrotados en 1991

Javier Casqueiro

El ex alcalde Juan Barranco se sabe el líder socialista más valorado en Madrid entre los ciudadanos de izquierdas, como confirman varias encuestas, y a Joaquín Leguina le pide el cuerpo continuar, como él mismo ha reconocido a este periódico, ante la atmósfera enrarecida que se respira en el panorama político nacional. Los socialistas que dirigen la Federación Socialista Madrileña, con 20.000 militantes, han sondeado a todo tipo de personajes relevantes de su partido y también a varios independientes para encontrar uno con suficiente tirón electoral como, para no dar por perdida la batalla de Madrid.El plazo fijado para componer esa sorpresa electoral expira la semana que viene y la figura que buscaban no ha aparecido. Los tanteados o han dicho claramente que no les interesaba la propuesta o no se han atrevido a asumir la responsabilidad de fracasar y pasar a ejercer de jefe de la oposición. En ese entorno, los máximos responsables de la FSM se empiezan a decantar por no remover el cartel.

Todo parece abocarse hacia la "solución revolucionaria", es decir que Barranco y Leguina sean los números uno del PSOE para el Ayuntamiento y la Comunidad. Estos candidatos fueron derrotados por el PP en las elecciones municipales y autonómicas de 1091, aunque Leguina logró luego la presidencia regional con el apoyo. implícito de IU.

Fuentes próximas al presidente de la FSM, el guerrista José Acosta, confirmaron que su defendido para concurrir a la alcaldía de la capital será Juan Barranco.

El círculo de renovadores que rodea a Leguina le presiona desde hace semanas para que olvide sus sentimientos favorables al abandono y repita. Leguina comentó a sus partidarios, en una reunión interna celebrada en Navidades por los renovadores en su sede del Canal de Isabel II, que renunciaría si finalmente se imponía esa solución revolucionaria. Varios le los presentes entendieron ese aviso como un compromiso. Leguina lo formuló entonces como una amenaza. Tanto Leguina como Barranco aseguraron ayer a este periódico, in embargo, que no quieren tantear más problemas de los a existentes a su partido y se mostraron comprensivos a aceptar cualquier tipo de solución. PASA A LA

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Sodeos de Leguina señalan a Barranco como el líder más valorado del PSOE

El ex alcalde socialista Juan Barranco se reunió con el presidente de la Comunidad, Joaquín Leguina, en una comida el pasado 30 de diciembre en la que ambos se contaron sus apetencias para el futuro más cercano. Barranco asegura que quiere retirarse de la política, volver a trabajar a su banco y montar una fundación de apoyo al Sur. Leguina teóricamente tiene también muchas ganas (le centrarse en su vida privada y de recuperar más tiempo para escribir. En la mesa surgió, sin embargo, la posibilidad de que Barranco pasase a la lista de la Comunidad como número dos para darle más consistencia a esa candidatura. Barranco rechaza también esta alternativa.

Joaquín Leguina aclaró ayer que le manifestó a Barranco todo su apoyo para lo que quisiese hacer. Barranco confirmó este extremo de la conversación y que ésta s9 celebró en un tono muy' afectuoso. Ambos se extendieron luego en desmenuzar proyectos futuros fuera de la política.

Barranco, sin embargo, está muy molesto con varios compañeros de partido. El ex alcalde presume de haber sido el senador más votado de España y asegura que si en las últimas generales Felipe González, con Baltasar Garzón de segundo por Madrid, hubiese tenido el mismo porcentaje de votos que el, el PSOE no habría perdido en 39 pueblos de la región. El ex alcalde ha contrastado esta autoestima con varias encuestas, incluidas las que acaba de encargar Leguina a Demoscopia, en las que siempre se le señala como el líder de la izquierda madrileña más valorado e identificado por los electores.

Baile de candidatos

Barranco no entiende por tanto el baile de candidatos, mujeres, ministros, ex ministros y figuras independientes, que se rumorean para ocupar su puesto desde su partido: "Que pongan a quien quieran porque esto parece un concurso subasta o la pasarela Cibeles en busca de una mezcla de Cicciolina o Rappel y no está el loro para entretener putas". Algunos de esos candidatos, como Leguina, Fernando Morán, Gregorio Peces Barba, Cristina Alberdi o Cristina Almeida, recaudan en esas encuestas menos adeptos que él.

El ex alcalde, en cualquier caso, es tan comprensivo como Leguina con el momento crítico que atraviesa el PSOE: "Si nos fuerzan a aceptar Ja solución revolucionaria no sé si estaré aunque yo) soy un jornalero del socialismo y no voy a ser nunca un problema para mi partido".

Las encuestas de Leguina confirman sobre todo dos cosas importantes relacionadas con Madrid. La primera es la negativa percepción que la mayoría de los madrileños tienen de la gestión del alcalde, José María Álvarez del Manzano, del PP, al frente del Ayuntamiento en cuanto a seguridad ciudadana, limpieza y tráfico. La segunda, que lleva a vislumbrar algún optimismo, es que el PSOE en la región es mejor visto en siete puntos que el estatal, por la mejora de transportes y carreteras.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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