El juez archiva querella presentada por Banesto contra Pedro Olabarría

El magistrado Ramon Maciá Gómez, titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Barcelona, ha archivado la investigación seguida contra el financiero Pedro Olabarría, producto de una querella presentada por Banesto. Un auto judicial fechado el pasado 9 de enero exculpa al financiero en estos términos: "Al confirmarse que no ha existido engaño típico en los hechos imputados en la querella, de conformidad con lo dispuesto en el número 1 del artículo 637 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, sólo cabe el sobreseimiento libre y archivo de las presentes actuaciones".El caso Olabarría estalló el pasado 10 de septiembre con la orden de detención del financiero dictada por el juez Luis Pascual Estevill, que en la actualidad desempeña el cargo de vocal en el Consejo General del Poder Judicial. Tres días después, el mismo juez ordenó una fianza penal de 25 millones de pesetas para Olabarría y posteriormente el depósito de una fianza por responsabilidad civil de 750 millones de pesetas en tanto que responsable último del grupo Harry Walker.

Presunta estafa

La acusación del banco, admitida a trámite en las diligencias del magistrado Pascual Estevill, sostenía que Pedro Olabarría y sus socios eran respgrisables del impago de una deuda de 639 millones de pesetas, contraída por el grupo Harry Walker en tanto que principales accionistas de este conglomerado de empresas.

La matriz del, citado grupo, Harry Walker, y otras firmas filiales han atravesado procesos de suspensiones de pagos y de quiebras en los últimos dos años. Banesto acusó a Olabarría de presunto alzamiento de bienes y estafa.,

Pascual Estevill asumió el caso Olabarría cuando actuaba como magistrado sustituto del titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Barcelona. Un mes después de aquella "vertiginosa instrucción" -así consta en el escrito de calificación efectuado por el fiscal-, el titular del mismo juzgado. revocaba la fianza personal de 25 millones de pesetas impuesta a Olabarría. Entonces, Ramón Maciá desvelé en su auto "la falta de una necesaria precisión en el escrito de la querella y la debilidad argumental del escrito presentado por la acusación".

Ahora, la decisión de archivar el caso desautoriza en la práctica las opiniones de Pascual Estevill contenidas en el sumario, especialmente cuando en uno de sus escritos se refería a que los inculpados se "enriquecieron ilícitamente".

El auto de archivo del magistrado Maciá puntualiza ahora que "es inconcebible que un selecto grupo de economistas y ex pertos del banco se vea sorprendidó por tres personas -Olabarría y sus socios-".