Dos informes miden la enorme violencia que viven los niños suizos y británicos
Una niña de cada tres y un niño de cada seis han sido víctimas de abusos sexuales antes de los 14 años en Suiza. En el Reino Unido, dos tercios de las madres encuestadas reconocieron haber sido golpeadas en presencia de los pequeños por el padre, padrastro o compañero que vivía con ellos y más de un 25% de los niños fueron también atacados. Los datos pertenecen a sendos estudios realizados en ambos países, y que se han dado a conocer la pasada semana, sobre el nivel de violencia que viven los niños.
El informe suizo lo han llevado a cabo los psicólogos de Zúrich, Regula Gloor y Thomas Pfister, sobre una muestra de 1.500 estudiantes de psicología, medicina y economía. En él se recoge que si se toman en cuenta otro tipo de abusos, como el exhibicionismo, los niños afectados por la violencia doméstica resultan ser una de cada dos niñas y uno de cada tres niños.
Los autores del primer estudio sobre La explotación sexual de los menores y los jóvenes en la Confederación Helvética apuntan que los agresores de las niñas en el 95% de los casos eran hombres, mientras que los de los niños son el 80% hombres y el resto mujeres, la mayoría cercanos a los menores.
La explotación sexual de menores empieza a dejar de ser un tabú en Suiza. La primera exposición itinerante sobre este tema, efectuada por la Oficina Federal para la Igualdad de la Mujer y el Hombre se inició en 1992, y los responsables de este estudio pretende crear un servicio de asesoría para las víctimas masculinas de abusos sexuales, que empezará a funcionar a partir del próximo mes de abril en Zúrich.
Heridas profundas
El informe británico, el primero elaborada en el Reino Unido en este sentido, hace hincapié en que la violencia doméstica deja en los menores que la presencian heridas mucho más profundas que las observadas hasta ahora por los psicólogos. Miedo, agresividad, insomnio agudo, ansiedad, fracaso escolar y dificultades para mantener una relación sentimental en la madurez, forman parte de la herencia recibida por los niños que crecen en un ambiente familiar agresivo. En éste país, más de 750.000 pequeños se encuentran en dicha situación, según el informe, publicado por Action For Children, una organización sin fines lucrativos que ha examinado las relaciones familiares de 108 madres y sus 246 hijos.Uno de los datos más llamativos del estudio británico es que una de cada 10 mujeres sufrió por lo menos una violación frente a su prole. Los relatos de algunos niños resultan también desoladores. Un muchacho dijo que su hermana solía quemarse las manos con cerillas, y varias madres han reconocido la vergüenza que les daba tener que llevar a un hijo al colegio con las moraduras producidas durante una riña entre los adultos.
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