Un absuelto del "caso Nécora" organiza el transporte de 10 toneladas de hachís
La policía buscaba ayer a un presunto capo del narcotráfico gallego, absuelto en el juicio de la Operación Nécora, a quien se considera el cerebro del transporte de unos 10.000 kilos de hachís incautados ayer en una playa cercana a Finisterre (La Coruña). Fuentes policiales no quisieron revelar la identidad del buscado para no entorpecer la investigación, pero sí confirmaron que fue uno de los 14 juzgados por la Operación Nécora a quienes el tribunal dejó en libertad sin cargos. El presunto capo no pudo ser localizado a primera hora de la mañana en su casa de Vilagarcía.
La policía detuvo en la operación a 18 personas, entre ellas a otro de los supuestos cabecillas: el vecino de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) Humberto Rodríguez. La operación sigue abierta y no se descarta que haya más detenidos.La droga era transportada en el pesquero Alza. El barco fue avistado a unas 15 millas de la isla de Onís por una embarca ción del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) que persiguió al Alza sin que advirtiera su presencia. Cuando el barco que llevaba la droga se aproximaba a Finisterre, su tripulación se dio cuenta de que estaba siendo objeto de vigilancia y encallaron el barco en la playa de Astorde, en tre Finisterre y Corcubión, tras una espectacular persecución a cargo de dos lanchas y un helicóptero del SVA.
Algunos vecinos del litoral, al ver el barco embarrancado, pensaron que se trataba de un naufragio, y se apresuraron a alertar a la Guardia Civil para rescatar a sus tripulantes. Uno de estos vecinos incluso llevó en su coche hasta la localidad de Muros a dos de los marineros del Alza. De camino hacia el lugar del naufragio las fuerzas de seguridad detuvieron a varias personas que se alejaban de la playa con las ropas empapadas.
También fue arrestado otro miembro destacado de la banda, José Luis Torrado, y el armador coruñés Rafael Fernández, Lucho, a quien se considera dueño del pesquero. Las investigaciones empezaron hace cuatro meses, coordinadas por los jueces Carlos Bueren y Baltasar Garzón.
Agentes del Servicio Central de Estupefacientes y de las comisarías de Vilagarcía y La Coruña pusieron en marcha la operación tras conocer que se estaba preparando un viaje a Marruecos para traer a Galicia un gran cargamento de hachís. La policía fue obteniendo todos los datos, desde las personas que financiaban el transporte hasta la lista de marineros que iba a ser enrolados en el pesquero. Antes incluso de que el Alza partiese hacia Africa, el juez Bueren ya tenía en su poder una fotografía del buque, dedicado durante algún tiempo a la pesca del arrastre.
En las últimas semanas, la embarcación hizo varias salidas en falso, para despistar a la policía. Hace unos 10 días zarpó por fin de La Coruña rumbo a Marruecos, donde cargó la droga el pasado fin de semana. Desde entonces, los efectivos del SVA estaban en alerta esperando el regreso del Alza, que presumiblemente tenía la intención de fondear la carga en la costa para transportarla luego a tierra.
Siete horas de huida
A medianoche del pasado miércoles, el arrastrero llegó a aguas españolas. Un helicóptero, una patrullera y uña lancha rápida del SVA le salieron al encuentro. Los tripulantes iniciaron una huida desesperada, que se prolongó casi siete horas. En un, último inténto por eludir el cerco, hicieron embarrancar el buque.Los tripulantes saltaron a tierra y se dieron a la fuga. Pero la policía logró detener a algunos de ellos. Otros fueron detenidos después en sus domicilios. A falta del pesaje oficial, fuentes de SVA estiman que en las bodejas del Alza había entre nueve y diez toneladas de hachís.
El capitán del pesquero, José Cadórniga Vidal, fue detenido hace unos meses en Lisboa, cuando trabajaba como patrón del buque Remundial, que transportó desde Sudamérica otro importante cargamento de cocaína.
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