Aumenta la tensión en los choques entre mineros del Bierzo y Guardia Civil

Dos nuevos detenidos y al menos diez personas con contusiones (un guardia civil herido) fue el resultado de las cargas realizadas a lo largo del día de ayer, especialmente durante la madrugada, por las fuerzas antidisturbios y la respuesta, con diversos artefactos caseros, de la población de Bembibre (León). Los enfrenta mientos tuvieron como escenario tanto la carretera N-VI (une Madrid y La Coruña) como el centro del pueblo. La escalada de la violencia durante las últimas horas en el Bierzo es notoria.Los manifestantes utilizaron en los choques con la Guardia Civil cócteles molotov, bolas de acero que eran arrojadas con tirachinas y voladores con una mezcla de pólvora y dinamita, según explicaron fuentes policiales. Este último extremo fue negado rotundamente por los sindicatos y los mineros que participaron en los enfrentamientos.

A mediodía de ayer, después de una masiva concentración en Bembibre, la población procedió por quinto día consecutivo a cortar con barricadas el tráfico en la N-VI. Por la tarde, un numeroso grupo de personas acudió al pueblo cercano de Santa Marina de Torre ante la bocamina del pozo María Ángela, donde seis mine ros mantienen un encierro desde hace hoy 24 días. Posteriormente, a primera hora de la noche, dos piquetes de unos 50 mineros en total volvieron a cortar el tráfico en la N-VI.

Mediación del alcalde

Con anterioridad, sobre la una de la madrugada de ayer, las fuerzas antidisturbios penetra ron hasta el centro de Bembibre utilizando, pelotas de goma y botes de humo por las calles. Unas 600 personas se concentraron ante la vivienda del al calde, Jesús Esteban, para re clamar una solución urgente a lo que calificaron de "estado de sitio". El edil negoció el repliegue con los altos mandos de las fuerzas antidisturbios y tras una masiva asamblea nocturna se logró una tregua por ambas partes. Manuel López, de UGT, señaló públicamente que siete personas que fueron detenidas, esposadas y trasladadas en un todoterreno de las fuerzas del orden recibieron "una panadera [paliza]". El gobierno civil ha rechazado esta versión.El origen de este conflicto está en el reajuste de la minería de la comarca. Más de 20.000 personas están pendientes de que la Administración central flexibilice los efectos negativos de la segunda reconversión minera: pérdida de entre 300 y 500 puestos de trabajo, reducción de cupos de carbón y cierre de varias explotaciones que mantienen múltiples y millonarias deudas con Hacienda, Seguridad Social, proveedores y plan tillas. El alcalde de Bembibre advertía ayer a EL PAÍS de la "peligrosa degeneración del conflicto", y del temor a que ocurra "algo irremediable".