Más de 50 muertos por el temporal de lluvias que afecta al norte de Italia

Las gravísimas inundaciones que sufre Italia, sobre todo las regiones septentrionales de Piamonte y Liguria, tras tres días de violentos temporales, han causado por el momento 32 muertos y una decena de desaparecidos, según los últimos datos oficiales. La cadena estatal de televisión RAI cifró anoche en 53 el número de víctimas. Sin embargo, fuentes no oficiales afirman que el cómputo final de muertos podría llegar incluso al centenar

La repetición de este desastre natural, valorado ayer por el ministro de Sanidad como "el peor del siglo", ha reavivado un debate político sobre la falta de prevención de estas emergencias, que se repiten una y hasta dos veces al año. La accidentada orografía italiana, marcada por la proximidad de la montaña a la costa en casi toda una península estrecha y larga como una bota, es un factor decisivo de estas inundaciones provocadas por violentas precipitaciones de tipo gota fría, frecuentes en todas las márgenes del Mediterráneo.Pero geólogos y ambientalistas insisten desde hace tiempo en que la deforestación progresiva es un dato más determinante de estos aluviones. A él se suma el deficiente mantenimiento de cauces y torrentes, cargados de basuras y barro acumulado que favorecen su rápido desbordamiento. La consecuencia es que, según datos difundidos por los sectores profesionales y políticos citados, la velocidad de descenso de las aguas se ha duplicado en Italia en pocos años.

Más de 20 de los 33 muertos registrados ayer, casi todos ellos en Piamonte, se ahogaron al ser arrastrados por las aguas dentro de sus coches. Se teme que el cómputo final de la catástrofe aumente, ya que centenares de pueblos se encuentran aislados y las previsiones indican que seguirá lloviendo. [Diez espeleólogos estaban anoche atrapados en una gruta del monte Malo, en la provincia de Vicenza, informa Efe.]

Tras tres días de precipitaciones, en el noroeste de Italia se han recogido más de 60 centímetros de agua por metro cuadrado. Las grandes inundaciones de Florencia fueron consecuencia de lluvias del orden de los 44 centímetros por metro cuadrado. Otra causa de estas situaciones es la deficiente canalización de las aguas, sobre todo en el sur, donde los meteorólogos preveían ayer un recrudecimiento del mal tiempo. En Siracasa, por ejemplo, tras apenas 45 minutos de lluvia intensa, el agua superó los 5 centímetros de altura en las calles adyacentes a la Iglesia donde el Papa celebró misa, y algunos coches hubieron de ser abandonados por sus ocupantes.

En el norte, la Prensa habla de un retraso en la llegada de socorros, que acaparan toda la actividad de las fuerzas de orden público. Por ese motivo, y debido a la imposibilidad de garantizar la normalidad en las gradas más que por las condiciones del terreno, ayer fue suspendido el partido entre el Torino y la Juventus. El Gobierno rechaza las acusaciones y aceptan las responsabilidades señaladas por los ambientalistas, pero las cargan a los anteriores Ejecutivos.

También en Francia el mal tiempo está causando víctimas y graves daños en el sureste y en Córcega, donde se han registrado al menos cinco muertos, según los últimos datos oficiales. La parte occidental de la ciudad de Niza estaba ayer cubierta de agua y barro y el río Tarn se desbordó a su paso por la localidad de Saint Éminie.