Socialdemócrata, mujer, ex ministro

Socialdemócrata y cincuentón (a mitades), mujer (a cuartos), ex ministro (a dos tercios). Es el retrato robot aproximado de la nueva Comisión Europea, reunida ayer por vez primera. Pero todo retrato robot es simplificador. La media de edad de los 21 se sitúa en 52,6 años. Diez comisarios están en la cincuentena, siete en la cuarentena. El decano es el noruego Thorvald Stoltenberg (63 años), seguido de Edith Cresson (60). El benjamín es el griego Christos Papoutsis (41), que desplaza a Manuel Marín (45) de este puesto.Las mujeres han multiplicado por cuatro o por cinco su presencia. La comisión Delors sólo cuenta con Christiane Scrivener (antes tuvo también a Vasso Papandreu). Ahora serán cinco, si Suecia se integra y por tanto Anita Gradin se incorpora. Todas de izquierdas, si así se califica a la radical italiana Emma Bonino. Y de mayoría norteña: Gradin, la danesa Ritt Bjerregaard, la alemana Monika WuIff-Mathies. Las mediterráneas son Cresson y Bonino, la feminista más radical. Acaben siendo cuatro o cinco, superarán la cuota del 20% y pueden llegar al 25%. Un hecho revolucionario en la casa.

Once de los 21 son socialistas y afines, sin contar con la radical Bonino, izquierdista de palabra, pero militante en la obra de, un Gobierno de derechas. La comisión Delors contaba con cinco. Los democristianos son tres (Santer, Van den Broek y Oreja), dos menos que en el colegio saliente. Los liberales puros pasan de tres a uno (el alemán Bangemann). El peso de los conservadores también se ve reducido, de cinco a tres: el británico Leon Brittan y el irlandés Pádraig Flynn, que repiten cargo, y el nuevo francés Yves-Thibault de Silguy. Queda el segundo comisario italiano, Mario Monti, presidente de la Universidad Bocconi, a quien no se le conoce filiación política. Los socialistas -hay que esperar el voto de suecos y noruegos- pueden alcanzar la mayoría absoluta, bajo una presidencia democristiana. Ello tendrá un impacto en la sensibilidad social de Ja Comisión. Pero no siempre votarán en bloque. Frecuentemente el factor nacional o el tamaño del país es más decisivo.

El equipo Santer está nutrido de ex ministros: 14 sobre 2 1, además de un primer ministro aún en ejercicio (el propio Santer) y una ex primera ministra, Cresson. La presencia del mundo sindical, del que procede la alemana Wulff-Mathies, es una novedad. De los actuales comisarios, ocho repiten. El más antiguo es el español Manuel Marín (desde 1986), seguido por Bangemann y Brittan. De los cinco países con dos comisarios, sólo los dos españoles provienen del anterior colegio (Marín y Oreja). Italia incumple la regla no escrita de enviar a un comisario del área del Gobierno y otro de la oposición. Alemania sigue esa norma, aunque el gubernamental Bangemann no es de la CDU de Helmut Kohl.