Méndez cree desbordada la reacción de Cuevas ante el diálogo con el Gobierno

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, calificó ayer en Sevilla de "relativamente desbordada" la reacción, del presidente de la CEOE, José María Cuevas, con una posible ruptura de negociaciones sobre las ordenanzas laborales, ante el diálogo entre UGT y el Gobierno.

Méndez, que asistió en Sevilla a la presentación de la campaña de UGT sobre el Plan de Empleo Rural (PER), declaró que "no habrá consecuencias negativas para la CEOE tras las conversaciones entre UGT y el Gobierno", y subrayó que "la patronal no debe tener ninguna preocupación sobre el acuerdo, ya que no es más que un incidente protocolario".

Las conversaciones del pasado jueves entre los sindicatos y el ministro de Trabajo, José Antonio Griñán, para analizar la marcha de estas negociaciones motivaron la reacción del presidente de la CEOE, José María Cuevas, quien envió una carta al sindicato en la que expresaba la posibilidad de dejar en suspenso el acuerdo. Méndez declaró que la Administración "va a facilitar, y en ningún caso contradecir, el desarrollo del acuerdo", y añadió que "se trata de ajustar la derogación de las ordenanzas al desarrollo de las negociaciones en torno al acuerdo, y este ajuste consiste en evitar vacíos en los distintos sectores laborales, ya que podrían provocar el caos en las empresas". Méndez resaltó que "la obstaculización en la elaboración de informes entre las sectoriales de la patronal y las federaciones sindicales afecta negativamente al marco de la negociación y a la derogación parcial o total de las ordenanzas, un proceso pendiente desde hace 14 años y fundamental para el desarrollo del país".