El alcalde de San Lorenzo apuesta por una fusión con El Escorial
San Lorenzo de El Escorial (9.530 habitantes) y El Escorial (8.090) ya son siameses. Sus cascos urbanos ya se han unido y en la linde se ubica una decena de chalés que deben pagar impuestos a los dos municipios. Esa zona que une a los dos pueblos es, paradójicamente, un motivo de desunión, porque ambas localidades se disputan la titularidad del trazado de los 12 kilómetros de linde. El alcalde de San Lorenzo, el socialista Francisco González, ha lanzado la idea de que las dos localidades se fusionen, para ahorrar así los servicios actualmente duplicados.En los últimos meses, los representantes municipales han sido incapaces de ponerse de acuerdo en ninguna de las reuniones que han mantenido con los técnicos del Instituto Geográfico Nacional con vistas a diseñar la separación territorial de ambos municipios. En juego están importantes fincas, decenas de chalés, edificios oficiales, monumentos históricos e industrias.
San Lorenzo de El Escorial surgió en 1789 bajo el reinado de Carlos IV. Para su creación, el monarca desgajó una parte del término municipal del entonces pequeño pueblo de El Escorial. Desde 1822, fecha del primer intento de fijar el deslinde, ambos municipios se disputan la titularidad de la linde. En los actuales planos topográficos, los deslindes municipales son puramente orientativos. "Por algún sitio habrá que trazarlos", dicen fuentes del Instituto Geográfico.
PASA A LA PAGINA 3
Decenas de chalés tienen que pagar dos veces sus impuestos por la confusión de la linde
VIENE DE LA PÁGINA 1La indeterminación de la linde que separa a ambos municipios ha llevado, incluso, a que una decena de chalés (entre el paseo del Álamo y la calleja de Sotomora) paguen sus impuestos municipales por duplicado. El alcalde de San Lorenzo admite que se están produciendo casos irregulares: "Algunos vecinos, para evitar problemas, piden licencias de obras en los dos pueblos".
Incluso hay dudas sobre en qué municipio se asienta la Casita del Príncipe, una construcción del siglo XVIII dependiente de Patrimonio Nacional. "Un tercio de los jardines que rodean esta edificación son nuestros", asevera, por su lado, el regidor de El Escorial, el también socialista Mariano Rodríguez. En San Lorenzo no están del todo de acuerdo.
Punto de fricción
El mayor punto de fricción territorial entre ambas ciudades se sitúa, sin embargo, en la finca El Campillo. Sus terrenos -más de diez kilómetros cuadrados- acogen un centro de datos del Ministerio de Justicia e Interior (donde se ubica el famoso ordenador Berta de la Guardia Civil), un cámping privado, el palacio del duque de Pino Hermoso, dehesas y un tramo del río Guadarrama. Al cámping, por ejemplo, se accede desde territorio de San Lorenzo, aunque teóricamente está situado por completo en El Escorial. Las posturas municipales están completamente enfrentadas. Ambos alcaldes reivindican como suya la totalidad de la finca de El Campillo. El regidor de San Lorenzo considera que este centenario problema podría solucionarse "con buena voluntad o la unión de ambos municipios".
Actualmente, los dos municipios tienen policías distintas, colegios separados, servicio de aguas independiente y cementerios diferenciados. "Se da el caso de que por la noche hay un policía municipal de servicio en cada pueblo para atender las escasas llamadas que se producen. Esto es ridículo", se comenta con resignación en el Ayuntamiento de El Escorial.
"Podríamos empezar creando una mancomunidad de servicios y luego ya se verá", señala Francisco González. El alcalde de El Escorial responde: "No entiendo cómo ahora puede decir eso, si fue él quien rompió el único acuerdo que hemos tenido en nuestra historia: tener unas fiestas patronales conjuntas".
Entre los años 1989 y 1991, los dos pueblos celebraron al unísono sus fiestas de san Bernabé (11 de junio, patrón de El Escorial) y san Lorenzo (10 de agosto, patrón de San Lorenzo de El Escorial). Razones económicas y sociales obligaron a esta solución. "Era absurdo que familias con hijos estudiando en ambos pueblos tuvieran un niño de fiesta y el otro en el pupitre", dicen los vecinos. Sin embargo, el alcalde de San Lorenzo rompió este acuerdo de manera unilateral. "Las posturas son ahora casi irreconciliables", aseguran fuentes del equipo de gobierno escurialense. "Digamos que fueron ellos los que se separaron. Nosotros estábamos primero", comenta el alcalde de El Escorial, Mariano Rodríguez.
Disputas ancestrales
Rodríguez propone, como solución definitiva a las disputas, que los límites sean discontinuos. "Quizás sea la única alternativa. Dejemos sin determinar nuevamente nunca nuestras lindes".
Fuentes de ambos municipios coinciden en señalar: "Todos estamos de acuerdo en que la duplicidad de servicios sólo provoca la duplicidad de gastos. Pero una cosa es lo que dicta la cabeza y otra lo que dice el corazón. Llevamos casi 200 años de disputas y así seguiremos otros tantos".
Hace seis años, el Instituto Geográfico revisó de nuevo todos los límites nacionales y locales. Al llegar a esta zona de Madrid, reunió a las comisiones municipales de ambos municipios. Por dos veces, fue imposible aunar las posturas. Se les dio un ultimátum. Si no llegaban a un acuerdo, se les dijo, la Comunidad de Madrid decidiría definitivamente las lindes. El pasado día 17, bajo esta amenaza, ambos ayuntamientos acordaron crear sendas comisiones para estudiar sus disputas y tratar de alcanzar un acuerdo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.