Piscina coladero
Agradezco enormemente el artículo titulado La piscina coladero, aparecido en El País Madrid del 29 de agosto, aunque pienso que podían haber profundizado más en el problema. En contestación a la carta del señor Astudillo López, me parece bochornosa la imagen de orden, seguridad y de estar todo bajo control que quiere dar con su carta publicada en esta misma sección el 3 de septiembre, cuando tan sólo seis días antes aparecía el artículo al principio mencionado (con foto incluida de un muchacho saltando la valla).¿Dónde estaban los vigilantes o los policías, que según dicho señor están continuamente en las instalaciones garantizando el orden y la seguridad de los usuarios, mientras éstos, que aparecen en la foto, y todos los demás que a lo largo del día se cuelan?
¿A qué se refiere con lo de "la actitud solidaria del conjunto de los ciudadados como mejor respuesta a acciones incívicas? ¿A que además de pagar la entrada hagamos de vigilantes y nos expongamos a un altercado? Solidarícese, señor Astudillo, con nosotros y pongan los medios, pero no en el papel, sino en la práctica, y no nos eche en olvido la próxima temporada; entonces si le estaremos agradecidos.
