Impugnaciones y crispación entre guerristas y renovadores en el congreso del PSOE de Huelva

Los renovadores del PSOE de Huelva abandonaron ayer tarde el séptimo congreso provincial del partido por considerarlo nulo, dadas las irregularidades que, en su opinión, cometieron los guerristas. Javier Barrero, candidato renovador a la secretaría provincial, anunció que recurrirán el resultado del congreso ante la Comisión Ejecutiva Federal del partido y esperarán la decisión de este órgano. "Insistimos en que somos mayoría, pero no se han respetado las reglas del juego, que son esenciales en un partido democrático", añadió Barrero.

La decisión de los renovadores parte de un acuerdo de la mesa del congreso, integrada por guerristas, sector que ganó la primera y única votación del día. La mesa impidió acceder a la sala y votar a los delegados renovadores de la agrupación de Cala. Allí se habían celebrado dos asambleas, una ganada por los renovadores y otra por los guerristas: Ambas llegaron al congreso, pero la renovadora fue marginada por la mesa.La determinación de los renovadores despertó cierta euforia en el sector guerrista. El secretario provincial, el guerrista Carlos Navarrete, dijo que los congresos no son recurribles. "Esto es una moda jurídica que se han inventado ahora los renovadores para aplicarla en los congresos que van a perder. Las decisiones de la mesa son definitivas, según dice el propio reglamento del congreso", señaló Navarrete.

El congreso onubense se inició con una sucesión de impugnaciones y con los nervios, de unos y otros, desatados. Los guerristas cobraron ventaja de partida porque ganaron, por 147 a 116 votos, la composición de la mesa. Tras el abandono de los renovadores, la candidatura guerrista a la ejecutiva provincial obtuvo un abrumador apoyo: 149 de los 156 delegados presentes en ese momento votaron a favor de la lista, por cuatro votos en blanco y tres abstenciones. Antes de los abandonos, estaban acreditados 282 delegados.

Forman la nueva ejecutiva provincial Domingo Prieto como presidente, Carlos Navarrete como secretario provincial y José Antonio Marín Rite, ex presidente del Parlamento andaluz, como vicesecretario.

Control de Chaves

Mientras, en Cádiz, Manuel Chaves lograba mantener el control del partido después de que la candidatura renovadora, encabezada por Alfonso Perales, obtuviera más del 60% de apoyo en el congreso provincial. En el mismo, Chaves abandonaba la presidencia mientras quedaba reducido, el guerrismo incipiente de la mano del alcalde de Conil, Saturnino Iglesias, que iba a presentar una lista alternativa.Los socialistas gaditanos de ambos sectores daban gran importancia al congreso en que su resultado podía romper el nivel de fuerzas en Andalucía.

En Granada, ambas facciones han llegado a un acuerdo para cerrar su crisis con la inclusión de 11 renovadores en la ejecutiva provincial, compuesta por guerristas desde la celebración del último congreso, al que sólo asistieron compromisarios de esta tendencia.

Según fuentes socialistas, en la nueva ejecutiva entrarán los renovadores Manuel Pezzi, consejero de Medio Ambiente, que ocupará la presidencia de honor; el alcalde de Granada, Jesús Quero, quien desempeñará el cargo de vicepresidente del partido, y el ex delegado de Gobernación Juan Santaella como secretario de formación.

Los guerristas mantienen los puestos clave, como la secretaría provincial, con Antonio María Claret García la presidencia en manos de Ángel Díaz Sol y la secretaría de Organización con Luis Rubiales. Este acuerdo, alcanzado ayer por Díaz Sol y el portavoz de los renovadores, Javier Torres Vela, cierra una crisis de seis meses de enfrentamientos entre los dos sectores. La mediación de Manuel Chaves fue decisiva.

En Córdoba, donde los socialistas renovarán su ejecutiva el próximo 1 de octubre, el consejero de Presidencia de la Junta, Luis Planas, dijo ayer que el parlamentario José Mellado, del sector renovador, seria un buen candidato para ocupar la secretaría provincial si antes de presentar su candidatura abandona alguno de los siete cargos institucionales y orgánicos que acumula y si reúne un amplio consenso que agrupe a la mayoría renovadora.