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Fernando Morán se compromete a retrasar 15 días su dimisión

Xavier Vidal-Folch

El presidente de los europarlamentarios socialistas españoles, Fernando Morán, ha acordado con la dirección del PSOE establecer un plazo de dos semanas antes de hacer efectiva su dimisión como líder de la delegación española en Estrasburgo. Morán comunicó a sus colegas socialistas el martes, en Bruselas, que renunciaba a presidirles, mediante el envío de sendas fotocopias de la carta que con fecha 21 de julio había enviado a Joaquín Almunia, y de la que remitió copia a Felipe González y a Raimon Obiols.En dicha carta el ex ministro de Exteriores se lamentaba de las actuaciones de algunos de sus compañeros, que a su entender están laminando su prestigio mediante declaraciones a la prensa, en las que sostienen que su jefe de filas incumple los compromisos adoptados por el colectivo.

Almunia y Obiols han tratado en las últimas horas de convencer al que fuera cabeza de lista en las elecciones del pasado 12 de junio de que reconsidere su decisión. Es la Ejecutiva Federal del PSOE quien debe finalmente aceptarla.

Morán ha aceptado únicamente no hacer efectiva su renuncia durante un lapso de tiempo relativamente breve. Sin embargo, parece completamente decidido a llevarla a término, según manifestó ayer a EL PAÍS: "Hay que elegir entre libertad y esclavitud", manifestó. El veterano político dijo comprender las presiones de los dirigentes de su partido, y sus argumentos de que el momento es inadecuado, porque hay otros asuntos prioritarios. "Pero si al final siempre hacemos nuestra esta especie de chantaje moral, estamos perdidos". Este tipo de presiones "nos ha hecho callar durante mucho tiempo muchas cosas, y si no hubiéramos callado quizá hubiéramos evitado asuntos como los de Filesa, asistiendo así al deterioro de nuestra vida política".

Pulso con Alemania

El momento más acuciante del problema entre Morán y algunos de sus colegas se produjo cuando éstos criticaron a su cabeza de lista porque en su opinión no había hecho todo lo posible para conseguir la presidencia de la Comisión de Presupuestos del Parlamento Europeo, considerada prioritaria por el PSOE. "Los alemanes, que son mayoría, quisieron retenerla para ellos, pese a mi oferta de que renunciábamos a todas nuestros otros deseos explicó Morán a este diario. Sólo en segundo término aceptó la presidencia de la Comisión Institucional, comentó, una comisión que será importante en la preparación de la Conferencia Intergubernamental que debe preparar para 1996 la revisión del Tratado de Maastricht.Ayer el eurodiputado Antonio González Triviño inició una campaña de apoyo a Morán con una carta en la que critica las "maniobras de una minoría". La misiva, que lamenta la per sistencia de "actitudes desleales", ha recibido el apoyo de un grupo importante de compañeros, según fuentes próximas a Triviño.

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