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Ardanza alaba a un alcade de HB por contratar como peón a un un reinsertado

Pedro Gorospe

El ex miembrode ETA Jokin Zubillaga, condenado a 103 años de prisión y ahora reinsertado, ha encontrado trabajo. Se lo ha dado, a pesar de las órdenes de ETA, un alcalde elegido con el apoyo de Herri Batasuna. El primer edil de la localidad guipuzcoana de Amezketa, Joakin Galarza, firmó el contrato laboral del preso como peón y, a la vez, levantó la polémica en un pueblo cuyos siete concejales son de la coalición radical.

El lehendakari, José Antonio Ardanza, ha elogiado la actitud del alcalde de Amezketa, que considera "lógica y muy unida al sentir de su pueblo". Para el presidente vasco, es una reacción valiente y espontánea de alguien que, "ante la posibilidad de que un hijo del pueblo, después, de 13 años en prisión, pudiera trabajar a través de una oferta de empleo del propio pueblo, no se ha complicado la vida haciendo lucubraciones de las estrategias que le puedan interesar o no a HB".Joakin Galarza decidió darle trabajo para que el juez de vigilancia penitenciaria le concediera el tercer grado y así pudiese salir de la cárcel. El, como muchos otros miembros de HB en desacuerdo con la línea más dura de oposición frontal a la reinserción cree que "había que darle a Jokin alguna solución, porque, para que haya paz, lo importante es sacarlos de la cárcel", declaró a Diario Vasco. Galarza no fue localizado ayer, día festivo en su localidad.

El ex preso de ETA, expulsado por la banda cuando dio los primeros pasos que le acercaron a la reinserción, consiguió el tercer grado penitenciario en abril de este ano y ahora pasa la noche en la cárcel de Martutene (Guipuzcoa), a la que fue trasladado hace 15 días desde la prisión alavesa de Nanclares de la Oca. Este fin de semana se encuentra en su casa de Tolosa, disfrutando de un permiso hasta el lunes por la noche, cuando tendrá que volver al centro penitenciario.

Zubillaga comenzó a trabajar en su pueblo en julio, amparado por la discreción del propio alcalde, que prefirió firmar el contrato laboral mediante una orden de la alcaldía antes que someterlo a la publicidad de un pleno. Zubillaga, como el resto de los presos de ETA que, desoyendo sus órdenes, se han acogido a beneficios, penitenciarios, sólo quiere pasar inadvertido. "No quiero publicidad, entiendo vuestro trabajo", declaró ayer a EL PAÍS, "pero estoy preocupado. Lo estoy pasando mal".

Desde hace varias semanas, acude al Ayuntamiento a primera hora de la mañana y realiza labores de limpieza en edificios, caminos y montes con un grupo de peones. La decisión de dar trabajo al preso reinsertado es compartida por la mayoría de los concejales, integrantes de un grupo independiente que se presentó a las elecciones con el apoyo de HB pero que considera un poco lejanas las consignas políticas de la coalición. La nota discrepante la ha puesto la concejal Lourdes Larreta, quien, tras dimitir en desacuerdo con la medida, difundió un escrito al vecindario en el que criticaba la reinserción.

En el pueblo, algunos vecinos prepararon un recibimiento al ex etarra. "El trato a este chico es correcto y aquí se está viviendo todo esto con mucha tranquilidad", explicaron ayer en la casa parroquial de Amezketa. La medida choca con la campaña que ETA y Herri Batasuna están desarrollando en contra la reinserción. Herri Batasuna tiene pendiente una reunión con el alcalde y los concejales, de Amezketa. El Partido Popular, por medio de su portavoz en el País Vasco, Gregorio Ordóñez, expresó su rechazo a la contratación de ex etarras. "Espero que en Amezketa no exista ningún parado, dijo, "porque sólo así se puede explicar que le den trabajo en el Ayuntamiento a quien fuera un sanguinario asesino de ETA".

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Viaje al Ulster

Por otra parte, el PNV y Herri Batasuna han anunciado que viajarán al Ulster para estudiar el proceso de paz que ha conducido a un alto el fuego incondicional del Ejército Republicano Irlandés (IRA) tras 25 años de conflicto. Los dos partidos han anunciado su visita coincidiendo con la presencia en Irlanda del Norte de varios miembros del grupo Elkarri, entre ellos su portavoz, Jonan Fernández, hasta el próximo domingo.Elkarri, grupo pacifista que surgió del entorno de HB y que se ha separado de quienes preconizan la línea más dura, mantiene contactos con representantes del brazo político del IRA, el Sinn Fein, y con otros partidos, grupos pacifistas, representantes de la Iglesia católica y medios de comunicación.

La visita de HB coincidirá con el final de la de Elkarri y dudará siete días. La delegación estará formada por los miembros dé la Mesa Nacional de Herri Batasuna Floren Aoiz, Carmelo Landa y la responsable de relaciones internacionales Jasone Manterola. El PNV, por su parte, retrasará su viaje hasta después de las elecciones de autonómicas del 23 de octubre. Los elegidos por el máximo órgano del partido, el Euskadi Buru Batzar, para elaborar el informe sobre el caso irlandés son el portavoz de la Ejecutiva, Joseba Egibar, el alavés Juan María Ollora y Gorka Agirre.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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