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Un supuesto grupo neonazi asalta un un parvulario del barrio del Pilar

Un parvulario del colegio público Cardenal Herrera Oria (Fuencarral) fue asaltado, en fecha indeterminada aunque reciente, por un grupo de individuos que causó grandes destrozos de material escolar en cuatro aulas y enun gimnasio. Los asaltantes escribieron sobre los muros del centro infantil -a la sazón vacío- consignas racistas y estamparon varias esvásticas con las siglas BBP en distintos muros interiores del recinto infantil, enclavado junto a la Ciudad de los Periodistas. Los profesores descubrieron con desolación el asalto a su regreso de las vacaciones y presentaron, el miércoles, una denuncia en la comisaría de la calle de Ginzo de Limia. La policía investiga los hechos.Sobre el suelo de una de las aulas de la escuela asaltada, una marioneta de caperucita roja, de nariz respingona y con lazitos en las coletas rubias, mantiene su sonrisa. Sólo conserva la cabeza, ya que su cuerpo de trapo ha desaparecido en el asalto. El suelo del parvulario se ha convertido en un colector desordenado de objetos infantiles y material didáctico: muñecos con la cabeza hundida por pisotones; dibujos rasgados de mayores con grandes sombreros; libros con las cubiertas arrancadas... Los asaltantes reventaron las colchonetas del gimnasio, que han dejado sobre el suelo un reguero de gomas.

Presumiblemente, los autores del asalto penetraron al recinto por una puerta trasera, comentan consternados algunos profesores. Comenzaron por el gimnasio y siguieron por corredores y aulas, donde se entregaron a una extraña ceremonia de destrución. Allí se cebaron con el mobiliario escolar, que desparramaron por el suelo, sobre el que precipitaron pinturas témpera. De un cajón extrajeron tizas de cera marrón y verde, con las que embadurnaron los muros.

Esvásticas

Mata moros; Me cago en los moros; Moros bastardos, Putas, rubricado todo ello con cruces esvásticas y con las siglas BBP que, según algunos jóvenes el barrio, corresponden a un grupo autodenominado Brigadas Barrio del Pilar. Son las mismas siglas que aparecen estampadas sobre bancos y construcciones de un parque cercano, situado en La Vaguada, donde puede leerse, entre esvásticas: El parque es nuestro; Ni el asiático ni el africano son tus hermanos; Sieg Heil; Xenofobia; BBP. La grafí de todas las pintadas incluye la cruz celta sobre las letras de cada palabra.

Profesores y padres de alumnos del centro (540 colegiales), presentes en el parvulario asaltado, no aciertan a explicarse tanta destrucción. "Estamos seguros de que los asaltantes no pertenecen al colegio. No hemos sufrido conflictos durante el curso", dice un padre con desolación.

"El material escolar estaba ordenado en el centro de las aulas; habíamos conseguido del Ayuntamiento que las clases fueran pintadas. El asalto ha desbaratado nuestro esfuerzo", comenta con tristeza un enseñante.

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