Un hombre cae herido de un tiro en la cara en pleno centro
Un insulto, un puñetazo y un tiro en la cara. Eso es lo que recibió en la noche del sábado Luis Manuel Lázaro, angoleño de 20 años, en la confluencia de las calles de Ballesta y Desengaño, en el centro de la capital. El hombre, herido, fue ingresado en el hospital Clínico y luego en La Paz, donde recibió el alta la misma noche.La causa de la brutal agresión sigue sin conocerse. La policía, ayer, sólo disponía del relato de un compatriota de Lázaro, que presenció e intervino en los hechos.
Este testigo narró que sobre las once de la noche se acercó a Lázaro un hombre ebrio. Era de piel blanca y pelo negro. Con unos 50 años, vestía pantalón verde y camisa con flores del mismo color.
Entablaron una conversación en portugués. Discurrió fluida, hasta que el recién llegado repentinamente soltó un "¡hijoputa!", arreó un puñetazo a Lázaro y sacó una pistola de la cintura.
Con rapidez, según el relato del testigo, acercó el arma -de las llamadas quitamiedos por la pequeñez de su calibre- al rostro del joven. Apretó el gatillo. El proyectil, de 6,35 milímetros, le atravesó el carrillo izquierdo a Luis Manuel Lázaro.
El testigo, en ese momento, intervino: se abalanzó sobre el agresor -que apenas medía 1,60 metros- y le desarmó. El hombre de la camisa floreada huyó. En el cargador de la pistola quedaba una bala sin percutir.
El disparo, con orificio de entrada y salida, dañó a Luis Manuel Lázaro en la mandíbula y el maxilar izquierdo. Su acompañante avisó a una patrulla de la Policía Nacional, que alertó a una ambulancia. En el lugar no se encontró el casquillo.
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