Serbios y musulmanes llegan a un acuerdo para neutralizar a los francotiradores

Representantes de los serbios y musulmanes de Bosnia llegaron ayer a un acuerdo auspiciado por la ONU para detener la actividad de los francotiradores en Sarajevo. El pacto para silenciar a los tiradores emboscados, que debe entrar en vigor hoy, prevé el establecimiento de patrullas mixtas de serbios o musulmanes junto a cascos azules para controlar los sectores de la capital considerados de alto riesgo.El general Michael Rose, jefe de las Fuerzas de Protección de la ONU en Bosnia (Unprofor), saludó el acuerdo: "Es un paso muy importante hacia la normalización de la vida ciudadana", dijo. De cumplirse el pacto contra los francotiradores, los ciudadanos de Sarajevo podrán volver a caminar normalmente en lugar de correr de puntillas cada vez que salen a la calle.

Las autoridades de cada bando serán responsables de las violaciones del acuerdo en sus respectivos sectores, según el acuerdo presentado ayer a la prensa.

Las dos partes alcanzaron también un acuerdo verbal para detener los ataques en torno al aeropuerto de la capital, que han obligado a suspender el puente aéreo de ayuda humanitaria que abastece Sarajevo. Pero aún no se ha fijado una fecha para reanudar el suministro aéreo.

Menos éxito ha tenido el mediador internacional de la ONU para la antigua Yugoslavia, Thorvald Stoltenberg, quien visitó PaIe, sede del parlamento de los serbios de Bosnia, para intentar que los hombre de Radovan Karadzic vuelvan a considerar su rechazo al plan de paz del Grupo de Contacto.

La posibilidad de levantar el embargo de armas que pesa sobre el Gobierno de Sarajevo y que ha sido barajada por Washington ante la negativa serbia a aceptar el último plan de paz ha provocado una seria reacción en París. El primer ministro francés, Edouard Balladur, advirtió ayer que si se levanta el embargo, las tropas francesas destacadas en Bosnia se retirarán inmediatamente.