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Muere el secretario general de la OTAN víctima de un cáncer intestinal

El secretario general de la OTAN, Manfred Wörner, falleció a mediodía de ayer a los 59 años de edad en su casa de Bruselas como consecuencia de un cáncer intestinal que le fue diagnosticado hace dos años y que sólo en los últimos meses le impidió desarrollar plenamente las tareas de su cargo al frente de la Alianza Atlántica. El secretario general alternaba su estancia en la sede de la OTAN con frecuentes internamientos en una clínica de Aquisgrán, al oeste de Alemania, donde se le había diagnosticado la enfermedad y recibía el correspondiente tratamiento.

Wömer, que accedió a la secretaría general de la OTAN en julio de 1988, había desempeñado con anterioridad el cargo de ministro de Defensa de la República Federal Alemana. Jurista de formación, Wómer, que durante su etapa de ministro había sido firme defensor de la carrera armamentista de la OTAN y la modernización de sus misiles de corto alcance, se convertiría luego en adalid de la cooperación con los antiguos enemigos del Pacto de Varsovia, recibiendo por primera vez en la sede de la Alianza a los presidentes y ministros de los países del Este e impulsando la Asociación para la Paz.Su permanencia al frente de la OTAN fue prolongada en dos ocasiones ante la ausencia de un candidato alternativo para ocupar el puesto. El pasado mes de mayo, después de siete intervenciones quirúrgicas, se vio obligado a cancelar por primera vez su participación en una reunión de la Alianza.

Manfred Wörner pertenecía al Partido Demócrata Cristiano (CDU), del canciller Helmut Kohl, quien le incorporó al Gobierno alemán. Vivió su mayor revés político con el affaire en tomo al general de cuatro estrellas Günter Kiessling, al que destituyó por supuestos contactos homosexuales que resultaron una invención.

Las primeras reacciones de condolencia por su muerte han sido las de sus compañeros del partido democratacristiano alemán. Helmut Kohl ha asegurado que "Wörner fue un defensor de la firmeza occidental durante la guerra fría". El actual ministro de Defensa germano, Volker Ruhe, se ha mostrado profundamente afectado y ha manifestado que Worner pasará a la historia no sólo como el hombre que abrió la OTAN hacia el Este, sino como el que la abrió al mundo y a las Naciones Unidas".

A pesar del estado terminal de su enfermedad, el fallecido político había expresado en reiteradas ocasiones su deseo e intención de seguir trabajando. En una carta remitida recientemente a los ministros de Asuntos Exteriores y Defensa de la Alianza, Wörner mostraba su confianza en una pronta recuperación tras un periodo de descanso, y aseguraba que sus médicos le habían informado que podría volver a realizar sus funciones una vez finalizado el verano.

Woemer se mostró profundamente afectado por no poder. firmar el acuerdo de asociación de la OTAN con Rusia el pasado mes de junio. "He invertido tanta energía en esta asociación..." se lamentaba el secretario general de la OTAN, quien desde su ingreso en política en 1956 decidió hacer una carrera militar paralela, aprendió a pilotar un avión de combate y completó 1.500 horas de vuelo antes de tomar posesión de su cargo en Bruselas.

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