Oídos sordos

"Nosotros no tenemos capacidad para sancionar, pero los datos de las aeronaves que superen los decibelios se trasmiten a Aviación Civil", explica Juán Lema Devesa, director del Aeropuerto de Madrid-Barajas. Para que esto sea efectivo, los datos proporcionados por los 14 sensores del llamado sistema de monitorado de ruidos tienen que ser procesados en un ordenador, para el cual aún no está terminado el programa informático. Así, por el momento, son como neuronas que reciben el impulso nervioso sin cerebro que lo procese. Un portavoz del aeropuerto indicó ayer que no se ha fijado fecha para su entrada en funcionamiento. Su presupuesto asciende a 120 millones de pesetas.Los micrófonos señalarán qué aeronaves exceden los umbrales sonoros permititidos y si realizan las maniobras en las proximidades del aeropuerto por los pasillos prefijados. Esta información podrá conocerse en el mismo momento en que suceda la maniobra. Los sensores se han ubicado en Tres Cantos, Alcobendas, La Moraleja, San Sebastián de los Reyes, Fuente el Fresno, Santo Domingo, Belvis de Jarama, Coslada, San Fernando de Henares y cuatro más alrededor del aeropuerto.