"El problema de TVE es que sus directores no son profesionales"

Luis Sánchez Enciso (Tetuán, 1930) ha hecho de todo en TVE: desde el programa cultural Ateneo, en 1966, hasta Sueños de Olimpia (La 2, 16.50, de lunes a viernes), serie con la que concluye su etapa profesional en la cadena pública. Entre 1980 y 1986 fue miembro del Consejo Directivo de RTVE, y de 1986 a 1989, director de Deportes.Pregunta. ¿Cuál es su balance personal de estos años en TVE?

Respuesta. Siempre he tratado de luchar por la dignidad y la eficacia de la empresa. He trabajado por comunicar libertad, progreso y reflexión. Creo que como realizador lo he logrado. Ha sido una parte fundamental en mi vida y la cierro con Sueños de Olimpia.

P. En 28 años habrá visto pasar a muchos directores generales. ¿Cuál ha sido el mejor?

R. No sé si soy injusto, pero me parece que TVE ha sido, por lo menos, ligeramente superior a cada uno de sus directores generales, porque no eran profesionales del medio. Entonces, el producto que se hacía les interesaba poco. Creo que Pilar Miró, como sí era profesional, sabía mucho más lo que era la televisión. Su momento fue el mejor.

P. Su etapa como responsable de deportes fue muy criticada.

R. Llevamos el deporte a La 2 y la cadena alcanzó cuotas de pantalla que no había conocido. Los deportes produjeron más dinero que nunca y tuvieron más prestigio que nunca. No me dio tiempo de hacer lo que hubiera querido, que era ayudar al espectador a comprender que al ver deportes no está viendo sólo un juego, sino muchas más significaciones, que incluso le dan más belleza y atractivo. La gente de deportes me atacó bastante porque yo no soy especialista en deportes.

P. También le reprocharon que simultaneara su puesto en TVE con las campañas del PSOE.

R. Yo no trabajé profesionalmente para el PSOE, nunca cobré al partido por mi trabajo. Además, tenía el permiso de TVE. Trabajé para el PSOE desde la campaña constitucional hasta 1983. Y no fui el único. También lo hicieron Pilar Miró y Gómez Redondo. Y Gustavo Pérez Puig y Martín Maqueda para UCD. Esa no era una actividad clandestina: uno pedía permiso y se lo daban.