La derrota dejó secuelas
Bulgaria y Suecia se clasifican para las semifinales
La selección española de fútbol vuelve hoy a casa, arrastrando las secuelas de un Campeonato del Mundo en el que empezó siendo muy criticada y ha terminado con aureola de héroe por su partido ante Italia. El jugador del Real Madrid Luis Enrique tiene la nariz rota por un codazo y precisará intervención quirúrgica. Julio Salinas, responsable de un tremendo fallo, tuvo que explicar una y mil veces aquella jugada. "No he matado a nadie", dijo. En los partidos disputados ayer, Bulgaria, que derrotó a Alemania, y Suecia, que superó a Rumania en el lanzamiento de penaltis, se clasificaron para las semi-finales.
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