La Hacienda británica asusta a los vecinos de la 'casa de los horrores' de Gloucester

Frederick West, el albañil de Gloucester acusado de haber cometido al menos doce asesinatos de mujeres, va a tener sorprendentes repercusiones fiscales para sus vecinos. Los residentes en los aledaños de la casa de los horrores han sido advertidos por el fisco británico que deben declarar los ingresos atípicos percibidos a raíz del descubrimiento de restos mortales en el número 25 de la calle de Cromwell de esa localidad, donde residía Frederick West. La esposa de West, Rosemary, está inculpada de haber colaborado presuntamente con su marido en los asesinatos de nueve mujeres que vivieron en ese inmueble.El caso despertó la atención de los medios de comunicación de todo el mundo y una legión de periodistas poblaron esta calle durante semanas, lo que fue aprovechado por los vecinos para hacer su agosto. Unos cobraron a las cadenas de televisión por filmar imágenes desde sus jardines, otros vendieron bebidas a los periodistas que montaban guardia frente a dicha casa. Los más avispados cobraron a los representantes de los medios de comunicación incluso por el uso del lavabo.

Un portavoz de Hacienda manifestó el pasado lunes: "Esperamos que la gente declare sus ingresos extraordinarios", y advirtió de que las investigaciones no se llevarán a cabo hasta que no finalice el corriente año fiscal, es decir, en el mes de abril del próximo año-