El principe de Gales quiere ser un rey para todas las religiones

"EI componente católico de la soberanía es tan importante [como el protestante], por no mencionar el islámico, hindú o zoroástrico". Con estas palabras, pronunciadas en el contexto de un largo documental sobre su vida que emitirá la cadena de televisión ITV el próximo miércoles, con motivo del 25º aniversario de su investidura como heredero del trono, el príncipe de Gales ha abierto un nuevo frente de debate en el Reino Unido. Según Sunday Times, los verdaderos deseos del futuro -y dudoso- monarca son convertir a su país, tras 450 años de monarcas jefes de la Iglesia, en un Estado aconfesional.

El desapego del príncipe Carlos hacia la Iglesia de Inglaterra ha levantado ampollas entre el alto clero poco partidario de perder las prerrogativas que le otorga su identificación absoluta con la monarquía. Pero el príncipe considera que ha llegado el momento de romper con las viejas tradiciones. Si algún día su cabeza llega a ceñir la corona real, el rey Carlos desearía figurar como cabeza visible de las múltiples confesiones religiosas que conviven en el Reino Unido.En realidad, en el reportaje de dos horas y media realizado por el periodista Jonathan Dimbleby, que ha seguido al príncipe durante meses, y que será emitido el miércoles por la ITV, Carlos de Inglaterra no es tan explícito con este tema. Aún así su afirmación de pluralismo religioso no ha gustado.

"Si lo que el príncipe ha querido decir es que el cristianismo es igual a las demás religiones, nosotros diferimos profundamente de su punto de vista", declaró al Sunday Times, el antiguo arzobispo de Canterbury, lord Coggan. "En tanto que hombres, todos somos iguales ante Dios, pero supongo que no querrá decir que una religión es tan buena como cualquier otra".

El reportaje ha despertado el morbo de los británicos ante la promesa de que el príncipe, por una vez, abre su corazón a las cámaras y desvela toda la verdad de su relación con Camilla Parker-Bowles.